Víctor Fernández acusa a Courbis de vender un falso mensaje

Al entrenador del Celta, Víctor Fernández, le costó creer que un equipo que gasta fama de ofensivo adoptase tantas precauciones como las que ayer tomó el Marsella. Esperaba Balaídos a un equipo armado arriba que obligaría a los jugadores del Celta a pedir permiso para subir al ataque, pero fueron los franceses los que consultaron cada contragolpe con Rolland Courbis, el técnico marsellés. Algunos jugadores que conocen la Liga francesa, como Mostovoi, habían alertado de que el OM iba a ser todo precauciones. Fernández lo comprobó nada más comenzar el encuentro. "Ellos vendieron el mensaje de que venían a marcar un gol, pero pronto descubrimos que no era así", se lamentó el entrenador céltico. Su equipo se encontró siempre con siete u ocho jugadores franceses por delante del balón, y el Celta tuvo que apelar al disparo lejano, una suerte que no es su especialidad. "Era dificilísimo llegar a su portería", reconoció Fernández. Así las cosas no fue extraño que los de Vigo hubiesen jugado "el mejor partido de la temporada en el aspecto defensivo", en palabras de su entrenador. Ahora, Fernández confía en el oficio de sus hombres, muchos de ellos con una vasta experiencia internacional a sus espaldas, para recuperar el pulso de la Liga.Rolland Courbis mantuvo su mensaje, pese a las críticas de Fernández. "El primer objetivo era marcar un gol y no lo conseguimos. El segundo consistía en no encajar ninguno, y ése sí que lo hemos logrado". Lo afirmó en una caótica rueda de prensa sin traductor que tuvo que repetir para la prensa española con un intérprete que como jugador lo dio todo por el Olímpico de Marsella: Passy, ahora jugador de la Sociedad Deportiva Compostela.