De la Barreda no se rinde
La versión oficial, aunque edulcorada, se parece bastante a esta otra, pronunciada en voz baja: "Francisco de la Barreda está desquiciado, y a Julia Bango le falta un cuarto de hora...".El presidente del PP de Canarias, José Miguel Bravo de Laguna, asegura que, detrás de las denuncias del ex presidente local, sólo habita la fantasía: "No hay ni atisbo de corrupción en ninguno de los diez casos que denuncia".
Bravo de Laguna sostiene que De la Barreda mezcló las extrañas agresiones a la abogada con su afán desmedido por ser candidato. Y que, al verse descabalgado, tiró de la manta. "No ha hecho ningún bien al partido", añade el presidente regional, "y además se ha pasado al comparar Tenerife con Sicilia y a nosotros con Al Capone".
De la Barreda sigue en sus trece. Tan es así que dispuesto está a denunciar sus sospechas ante la Fiscalía Anticorrupción.
El PP de Tenerife, aunque tarde, decidió el jueves personarse en las diligencias abiertas por las agresiones a Julia Bango. Asegura que es para echar una mano.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.