'Hilary y Jackie' narra la intensa relación de dos hermanas, dice su director

A la violonchelista británica Jacqueline du Pré (1945-1987) le bastaron 15 prodigiosos años en los escenarios para asegurarse una plaza de honor entre los más geniales intérpretes del siglo. Hilary y Jackie, la película del realizador Anad Tucker basada en la polémica biografía escrita por los hermanos de la artista, Hilary y Piers, ofrece un desgarrador retrato de su compleja y atormentada vida. "Me fascinó la verdad que cuenta Hilary sobre la intensa relación que tuvo con su hermana", afirmó ayer Tucker en Barcelona.

La película se estrena más de una década después de la muerte de Jacqueline du Pré, a los 42 años, víctima de la esclerosis múltiple que truncó su carrera y la obligó a vivir recluida en una silla de ruedas. La turbulenta relación entre Hilary, que abandonó su carrera musical como flautista para llevar una vida tradicional de ama de casa, y su célebre hermana es, en opinión de Anad Tucker, realizador especializado en documentales de televisión que debuta en el cine con este filme, una reflexión sobre el precio del talento, la incomunicación y la enfermedad que marcaron la trágica vida de un genio de la música.La actriz británica Emily Watson, que da vida a la gran violonchelista, y la australiana Rachel Griffiths, que encarna a Hilary, protagonizan el perturbador retrato, que muestra a Jackie du Pré como una mujer atormentada, cruel, egoísta y de una enfermiza voracidad sexual.

El filme ha desatado una gran polémica en el Reino Unido por los trapos sucios que ventila, provocando una indignada respuesta por parte de los músicos que conocieron a la malograda artista. "Cuando tratas un personaje real tienes una responsabilidad enorme porque en cuanto comienzas a hablar con la gente que lo conoció, te das cuenta de que no hay una verdad única, hay muchas verdades diferentes que, inevitablemente, molestarán a algunas personas, pero los hechos que cuento son reales, lo que cambia es la interpretación de esos hechos, que es la verdad de Hilary".

El episodio más polémico revive un ménage à trois entre Hilary, su marido Kiffer y Jackie, casada entonces con el ya célebre pianista y director de orquesta argentino Daniel Barenboim. La propia Hilary convenció a su marido para que compartiera cama con su cuñada para ayudarla a superar una profunda depresión. "El sexo es una parte de una historia dura y difícil que sólo ha escandalizado a determinados círculos del mundo de la música clásica y la alta sociedad británica, curiosamente los más obsesionados por el sexo y la clase social", asegura el realizador.

Aunque numerosas personalidades de la música clásica han mostrado su indignación por el retrato de Jacqueline du Pré, Daniel Baremboim, interpretado en la película como James Frain, ha optado por el silencio. "El flechazo entre Jackie y Daniel fue brutal y durante tres años vivieron un amor fantástico y triunfaron en los grandes escenarios", asegura Hilary, que acompañó al director en la presentación del filme. "Ba-remboim es un músico extraordinario y una buena persona, pero nunca comprendió las reacciones de mi hermana ni los motivos de su depresión. A Jackie le encantaba tocar el violonchelo, pero odiaba viajar y necesitaba el apoyo total de su familia, mientras él vivía sólo pendiente de la música".

Anand Tucker y Hilary du Pré contactaron en varias ocasiones con Barenboim, que se negó a participar en la preparación de la película. "Entrevisté a Barenboim para el libro en el que se basa la película, Un genio en la familia, pero no he vuelto a verle desde que se publicó", comenta Hilary. "Muchos músicos han protestado, pero hasta la fecha Barenboim se mantiene en silencio y espero que nos comprenda a todos".

Rodada durante sólo ocho semanas en el norte de Inglaterra, Hilary y Jackye, cuyo guión fue rechazado en Hollywood por más de 15 productoras, ha conseguido dos candidaturas al Oscar: a la mejor actriz y a la mejor actriz secundaria.