Rodilla pone al Pamesa en semifinales

El Pamesa pasó la prueba a la que le sometió el Bruguer en Badalona y se clasificó para las semifinales de la Copa Saporta en las que se enfrentará, el 23 y el 30 de marzo, al Aris de Salónica. El equipo valenciano empezó y acabó el partido a su aire, es decir ahogando al Bruguer en defensa y castigándole con un detalle técnico por aquí y las tablas de Rodilla para dominar el ritmo de juego en condiciones extremas. Pero no le bastó con eso. El Bruguer le puso en serios aprietos cuando afinó sus movimientos en ataque y encontró la buena mano del jugador más inesperado, Biota. El Pamesa estuvo por momentos en estado de coma y llegó a conceder 15 puntos de renta (57-42).En esa fase fue de inestimable ayuda la aportación de dos de reservas: Albert, que desquició a Dani García bajo tableros, y Maluenda, sin cuyos triples hubiera resultado poco menos que una quimera el parcial de 0-12 que le endosó su equipo al Bruguer (57-54). A partir de aquél momento, el partido volvió donde quería el Pamesa, es decir como en la primera parte. Fueron sintómaticas las seis personales en ataque de los diez primeros minutos. No había quien supiera por donde agujerear las defensas. Era el estado de cosas áspero y nervioso de las finales europeas. Los marcajes eran a ultranza y la elaboración de las jugadas era tan puntillosa que no dejaba resquicio para el menor alarde individual. Todo era demasiado rígido, lento y apocalíptico. Un panorama al gusto de Rodilla que provocó una rápida sustitución del base verdinegro, Corrales. Pero Raúl López enmendó a la perfección la labor de su compañero y el Bruguer, que echó mano de una zona 2-3, abrió una primera brecha que ya superaba su desventaja de la ida: 31-23. Pero la defensa del Pamesa continuaba causando estragos no ya en el lanzamiento sino en la circulación de balón del Joventut que perdió hasta 14 posesiones. Y tras el vaivén de la segunda parte, el Pamesa se recompuso. Rodilla anotó dos tiros libres a falta de 18 segundos para el final (69-64) y a continuación provocó una falta en ataque de Corrales. Fue la puntilla.

Estudiantes, en la Korac

Estudiantes cuenta hoy con todos los pronunciamientos para clasificarse por vez primera en su historia para una final europea. El equipo madrileño recibe en el Magariños (20.30, La2) al Ostende, al que ya derrotó en Bélgica por 82-84 en el partido de ida de la semifinal de la Copa Korac. José Vicente Hernández, entrenador de Estudiantes, considera clave que sus jugadores eviten un exceso de confianza y mantengan la concentración. La otra semifinal la cerrarán mañana en el Palau Blaugrana el Barcelona y el Panionios. El equipo azulgrana ya se impuso en Atenas por nueve puntos de ventaja (71-80).