Historia sobre ruedas

Los coches más preciados y admirados del mercado están aparcados este fin de semana en el Pabellón de Cristal de la Casa de Campo. En ese recinto se celebra la cuarta edición del Salón Internacional del Automóvil de Época, Clásico y Deportivo. Un selecto escaparate de 500 vehículos de ensueño que brillan por su antigüedad, elegancia, diseño, confort y glamour.Entre las estrellas de la colección figura el mini que perteneció a Juan Carlos I cuando era estudiante. También destaca el Mercedes utilizado por el general Perón en España, el Cadillac acorazado que regaló el ex presidente de Rumania Ceaucescu a Santiago Carrillo, el Hispano Suiza de la película Belle époque, el Astón Martín DB5 de las películas de James Bond, el Seat blindado de Dolores Ibarruri y un Chevrolet de los años treinta que perteneció a José Antonio Primo de Rivera.

Pero posiblemente la joya de la muestra sea El Abuelo, el primer camión militar fabricado por la Industria Barreiros y que sale por primera vez de su residencia en el Museo Eduardo Barreiros, de Valdemorillo. El espectacular vehículo, de ruedas elipsoidales, reconstruido meticulosamente durante tres años, acapara todas las exclamaciones y se ha convertido en capricho de coleccionistas. "Sin embargo, no tiene precio", aclara Emilio Olivares, portavoz de Retromóvil.

El 80% de los coches está en venta. Un exclusivo Pegaso Z 102 encabeza la lista de precios. Está valorado en 40 millones de pesetas. Aunque sólo se fabricaron 86 unidades de esta clase, es único en el mundo por su carrocería. El coche ya ganó un concurso de elegancia de París en 1955 y pertenece a Felix Creus, un madrileño de 80 años que cada mes airea su joya para acudir a tomar té a San Lorenzo de El Escorial. Un Seat 600 es el coche más económico: cuesta 200.000 pesetas.

Al certamen han acudido 30 clubes de automóviles de toda España. El Morgan Sport Car, uno de los más activos, que organiza concentraciones por toda Europa, exhibe una furgoneta restaurada que era utilizada como estafeta de correos ambulante en los años sesenta. A una de sus puertas esta prendida una tienda de campaña, y de otra, un escaparate en el que se venden objetos. Aquí, los visitantes pueden comprar todo tipo de accesorios, repuestos, lubricantes, maquetas, libros y juguetes relacionados con el mundo del automóvil.

El año pasado acudieron a la muestra 40.000 personas y se vendieron más de cien coches. En esta edición se espera a 50.000 visitantes y más de 200 adquisiciones. Ayer mismo, por ejemplo, se vendió un Jaguar Mk7 del coleccionista Juan Collín por un precio de seis millones.

En esta edición, Retromóvil homenajeó a los grandes nombres de la historia del automóvil. A título póstumo, se entregó la Medalla de Plata a Eduardo Barreiros, por su "labor infatigable en la motorización en España" y por el nacimiento de su fundación, dedicada a la investigación y divulgación en el campo de la automoción. El mismo galardón recibió Paco Bultó, creador de las firmas Montesa y Bultaco y piloto de carreras. También hubo distinciones para Ángel Nieto y Ricardo Tormo, recientemente fallecido.

IV Salón Internacional del Automóvil de Época, Clásico y Deportivo. Hasta mañana, domingo, en el Pabellón de Cristal de la Casa de Campo. Metro Lago, puerta del Angel y Alto Extremadura y autobuses de la EMT 31, 33. 36, 39 y 65. Horario, de diez de la mañana a 21.00. Precio, 1.000 pesetas adultos, 500 los niños de 7 a 14 años, y los menores de siete años, gratis.