Baños Árabes para Miss España

Los Baños Árabes de Jaén fueron ayer el escenario en el que Miss España, Lorena Bernal, pasó la primera prueba de una sesión fotográfica tras obtener el codiciado título la noche del martes. Junto a ella aparecieron Carmen Fernández, Miss Sevilla, e Inma Nadal, Miss Lleida, sus damas de honor. Las tres fueron las seleccionadas entre un total de 52 jóvenes que este año han participado en el certamen celebrado en Jaén. La llegada de las misses alteró la apacible tranquilidad que se respira habitualmente en los Baños Árabes, los más grandes que se conservan en Europa. Incluso se hizo la vista gorda cuando los fotógrafos situaron a las tres chicas sentadas sobre uno de los monumentos de la entrada para hacerles fotos en bañador. Con el mismo atuendo se introdujeron en una visita a los baños musulmanes en los que siglos atrás se separaban cuidadosamente a los hombres de las mujeres en horarios diferentes para que no coincidieran en su interior ambos sexos aspirando el mismo vapor. Casi diez siglos separaban las dos estampas. Lorena Bernal, de 17 años, declaró en este marco árabe que piensa utilizar este título como trampolín para encontrar un hueco en el mundo de la publicidad, el cine o la televisión, según explicó luciendo sobre la cabeza la corona que le fue entregada por su antecesora, María José Besora. Las lágrimas de la noche al saberse ganadora se convirtieron en sonrisas contínuas durante la mañana. Con aplomo explicó ante las cámaras que esa entereza se debía a la educación que había recibido de sus padres desde que era pequeña. Se crió en Guipúzcoa, provincia a la que representaba dentro del certamen. Con el mismo aplomo, contestó a las preguntas sobre la situación política en que se encuentra inmerso el País Vasco. Todo lo que allí ocurre, resaltó, le incumbe "totalmente". No tuvo reparos en asegurar que le parece "un horror" la existencia de la banda terrorista ETA, además de considerarla "para nada necesaria". Sobre el proceso de autodeterminación de Euskadi que ahora se encuentra sobre la mesa de los partidos nacionalistas dijo: "Quiero ser Miss España, no meterme en temas de política ni de religión". Mucho más fácil le resultó a Lorena Bernal hablar de su familia, de sus proyectos y del "sueño hecho realidad" que ahora está viviendo. Contó que nació en Argentina, que con ocho meses llegó a Guipúzcoa y que el paso del tiempo ha hecho que se sienta vasca, sin ningún tipo de dudas. Incluso definió su personalidad y la identificó con señas que cree definitorias de los habitantes del norte: "Me siento vasca, tengo personalidad vasca, cabezona, cerrada y noble". Lorena nació en el continente americano porque su abuelo salió de España después de la guerra civil. Sus padres regresaron y ahora se encuentran separados. Este hecho, explicó Miss España, no ha supuesto para ella ningún trauma porque considera lógico que si entre dos personas no es posible la convivencia lo más oportuno es la separación. Fue su padre la primera persona a la que llamó por teléfono la madrugada de ayer para compartir la alegría del título. "Mis padres me ayudan a tener los pies en la tierra". Peor suerte corrió un "amigo especial" que reconoció tener, pero al que no otorga categoría de novio oficial, porque todavía ayer por la mañana no había podido tener con él una conversación.