Final polémico en el Safari

El Rally Safari acabó con la victoria de Colin McRae (Ford) y la descalificación de Tommi Makinen (Mitsubishi) por una irregularidad cometida durante la primera etapa. Carlos Sainz (Toyota) se clasificó tercero y fue uno de los pilotos que mejoraron su posición tras la eliminación del actual campeón, que aún sigue como líder del Mundial.La última etapa discurrió sin cataclismos en la pista. Ya antes de que concluyera, el caso de Makinen llamó más la atención, y se convirtió en foco absoluto después de la general ceremonia del podio. McRae fue proclamado vencedor, Makinen segundo y el francés Didier Auriol (Toyota) tercero.

Sainz, provisionalmente cuarto, esperaba la resolución de los comisarios a la protesta presentada por Toyota contra Makinen. En el vídeo aportado como prueba se le veía recibiendo ayuda externa: los nativos levantaron su coche dentro de un tramo para permitirle cambiar una rueda pinchada y le dieron un cuchillo para arrancar la goma destruida. Ambas maniobras constituyen una irregularidad, según el reglamento.

La descalificación de Makinen, que se enfadó pese a que su equipo la aceptó, colocó a Auriol segundo y a Sainz tercero. Ahora éste es tercero del Mundial, a 10 puntos de Makinen, que vio quebrada su racha y la de Mitsubishi. El campeonato se aprieta, a la espera de la siguiente prueba, en Portugal (21 al 24 de marzo).

Sainz conoció la noticia mientras se recuperaba comiendo jamón español junto a la piscina de su hotel. Sus mecánicos le echaron al agua. "No hay demasiado que celebrar", reconoció. Más de uno pensó por qué Toyota no tuvo tanta rotundidad en Australia el año pasado: un embrollo reglamentario salvó a Makinen ante la pasividad del equipo de Sainz, y el episodio resultó decisivo para que el finlandés ganara el título.

"Tal como se presentaba el rally, el resultado no está mal", añadió el piloto español. "Durante la carrera no hemos tenido suerte, hemos padecido muchos incidentes". Los números le avalan: McRae sólo le superó en los tramos en que él sufrió averías. El piloto escocés, que corrió con el pulgar derecho roto, acertó en su apuesta por la regularidad -fue el único favorito sin problemas- y conquistó su 17ª victoria en el Mundial, con 14 minutos de ventaja. Era sólo la tercera carrera del nuevo Focus. Para Seat, el debut africano del Córdoba se saldó con resultado agridulce. El equipo español sumó puntos para el Mundial con la sexta posición de Harri Rovanpera, pero Piero Liatti abandonó a 100 kilómetros de la meta, por una avería en la bomba de aceite, cuando hubiera podido acabar cuarto.