El Madrid destituye a Hiddink y Toshack es el principal candidato para sustituirle
Guus Hiddink dejó anoche de ser entrenador del Real Madrid. Después del trámite del partido de Copa ante el Racing de Santander, la junta directiva se reunió y a la 1.30 de madrugada Lorenzo Sanz anunció su destitución. John Toshack, que ya entrenó al equipo blanco y ahora dirige al Besiktas turco, es el principal candidato a sentarse en el banquillo madridista. Un directivo viaja hoy a Estambul para pagar los 90 millones de pesetas de la cláusula de rescisión. Fabio Capello no será el técnico, porque, entre otras exigencias, no aceptó dirigir al equipo en lo que resta de temporada.
"Es más barato echar a un entrenador que a la mitad de la plantilla", dijo un Sanz con gesto triste y que lamentó tomar esta medida, pero que aclaró: "La decisión estaba tomada hace dos días, pero nos hemos dado un margen de tiempo para ver si encontrábamos un sustituto. Se trata de un técnico que debe manejar un vestuario que es difícil". Y añadió un dato importante, como un aviso a la oposición: "Me preocupa el divorcio que hay entre la afición y el equipo. Creo que hay cosas detrás que no me gustan".Sanz señaló que se han barajado varios nombres para la sustitución, y reconoció que entre ellos está John Toshack, ex técnico blanco. "Estoy muy agradecido de que se hayan acordado de mí", dijo el galés desde su exilio de Estambul. El relevo en el banquillo tras el intento frustrado de fichar a Capello ha sido complicado. Los nombres de Daniel Passarella, Radomir Antic y Luis Aragonés no terminaban de convencer a la directiva. Ayer el Madrid entró por la tarde en conversaciones con Toshack, que tiene contrato hasta el año 2000, pero ve posibilidades de rescindirlo. Y no tiene los prejuicios de Capello de coger el equipo ahora mismo. "Los siete puntos de desventaja con la cabeza de la Liga no es un margen preocupante", ha dicho. Toshack, además de flexible a las necesidades del Madrid, es amigo de Sanz desde hace muchos años. Fue precisamente el actual presidente quien convenció a Ramón Mendoza para que le contratara en la temporada 1989-90, cuando el Madrid logró su quinta Liga consecutiva. Hoy viaja un directivo a Estambul para pagar los 600.000 dólares (90 millones de pesetas), de la cláusula de rescisión con el Besiktas. Sería el único trámite a salvar
El fracaso con Capello
El fracaso de los contactos con Capello, es toda una historia. A primera hora de la mañana de ayer, el italiano se marchó a Marbella para proseguir sus vacaciones. En el aeropuerto de Barajas, no quiso dar detalles de lo sucedido: "No quiero hablar. Claro que me gustaría volver, pero de momento seguiré disfrutando de mi año sabático". Su representante en España, Carlos Uriarte, añadía poco después: "En el fútbol nunca se puede decir que una negociación está definitivamente rota, pero por ahora es imposible que Fabio venga al Madrid". Capello regresará al Bernabéu el próximo miércoles a fin de comentar para la COPE el partido que el Madrid disputará ante el Dinamo de Kiev.
El Real había preparado un minucioso plan para que Lorenzo Sanz y Fabio Capello hablaran en secreto del futuro. En las claves estaban pocos, entre ellos el jefe de seguridad del estadio Bernabéu, quien ayudó a preparar la cita, prevista a la una de la madrugada en la casa que el directivo madridista Antonio Méndez tiene en la urbanización Puerta de Hierro. El técnico había llegado al hotel acompañado de Laura, su esposa, y, en un intento de despistar a los periodistas que seguían todos sus movimientos, se despidió de ellos asegurando que se iba a descansar. Pero en lugar de subir a su habitación, Capello bajó al aparcamiento del hotel, donde le esperaba un conductor del Madrid con un coche distinto al habitual -el del club estaba en reparación- y se marchó a su cita con Sanz.
Sanz había abandonado el club por la puerta de atrás a última hora de la tarde. Incluso dejó su automóvil en el estadio para despistar. Desde allí se fue al lugar del encuentro con la única compañía del vicepresidente económico, Juan Onieva. Ni tan siquiera José Martínez Pirri, el secretario técnico del club, estuvo presente en la reunión.
Durante algo menos de dos horas, Sanz y Capello hablaron de algunos temas pendientes del pasado y comenzaron a pensar en el futuro del Madrid. Pronto las posturas se mostraron encontradas. Según fuentes del Madrid, Capello no admitió hacerse cargo del equipo inmediatamente. La intención de Sanz consistía en que se sentara el sábado en el banquillo. En los días anteriores, el técnico no había dado importancia a esta cuestión. Su norma siempre ha sido trabajar desde el comienzo de la temporada, pero en esta ocasión estaba dispuesto a mostrarse flexible porque considera que la actual plantilla la formó él. Al final, no hubo posibilidades de negociación sobre este asunto porque en otros tampoco se llegó al acuerdo.
Capello pidió al Madrid dos años y medio de contrato y 2.000 millones de pesetas. El Madrid quería un año y lo que resta de temporada. Tampoco se entró a negociar en este punto, porque los representantes del Madrid se sorprendieron con las peticiones de jugadores de Capello. El italiano planteó al club una amplia reforma de la plantilla, y llegó a pedir la baja de una decena de futbolistas. La directiva planea para el año que viene muchos cambios, pero no tantos como los que pretendía el entrenador.
Antes de las tres de la madrugada, Lorenzo Sanz llegaba a su casa y Capello entraba en su hotel. Las negociaciones estaban rotas. El técnico decidió adelantar entonces su viaje a Marbella, donde cenó con Jesús Gil, y el presidente se puso de nuevo a pensar qué hacer con el equipo. Su preocupación sigue siendo que la plantilla reaccione antes de jugar con el Dinamo de Kiev. Hiddink se sentó en el banquillo del Bernabéu para dirigir al Madrid en su trámite de la Copa. Después vino el terremoto. Toni Grande, el segundo técnico, dirige hoy.
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