_
_
_
_
_

Tres ministros griegos dimiten por la polémica detención de Ocalan

Turquía prepara un juicio rápido con intervención de militares

El caso Ocalan se cobró ayer sus primeras víctimas políticas en Grecia, país que se siente víctima de un fracaso moral y diplomático sin precedentes. El primer ministro, Costas Simitis, exigió la dimisión del ministro de Exteriores, Teodoros Pángalos, y de los dos ministros responsables de la policía y de los servicios secretos, cuya actuación y descoordinación han dejado en evidencia a Grecia. A Pángalos le sustituye uno de sus mayores críticos, George Papandreu, hijo y nieto de primeros ministros. En Turquía, ayer trascendió que Abdalá Ocalan será juzgado, quizá este mismo mes, por el Tribunal de Seguridad del Estado, en el que habrá un juez militar. Nadie duda de que será condenado a muerte. El tribunal se ha caracterizado hasta ahora por sus duras sentencias tanto contra terroristas kurdos como contra intelectuales moderados. Tres fiscales iniciaron ayer el interrogatorio del jefe de la guerrilla kurda en la cárcel de máxima seguridad de Imrail. La declaración durará entre siete y diez días. Mientras, se van aclarando ciertos aspectos de la misteriosa captura de Ocalan, refugiado en la Embajada griega de Kenia hasta que tomó el avión con rumbo a Turquía. El propio Pángalos ofreció ayer un dato: "[En la embajada] habló por móvil con todo el mundo".

Más información
La oportunidad de Ocalan

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_