Industria propuso cambiar la norma de ayudas mineras un día antes de saltar el "caso Telecable"
Industria entregó a los sindicatos el día 10 de febrero -un día antes de que estallara la polémica en torno a las ayudas a empresas del cable asturianas- una propuesta de modificación de la orden ministerial que excluye de las subvenciones mineras a proyectos del sector servicios. La propuesta recoge ahora que podrán ser subvencionados proyectos de servicios "que incorporan un cierto contenido industrial". El ministro de Industria, Josep Piqué, como portavoz del Gobierno, rechazó de plano la nueva petición de crear una comisión investigadora hecha por el PSOE e IU.
La propuesta de modificación de la orden aprobada el día 6 de marzo de 1998 fue entregada a los sindicatos el pasado día 10, el mismo día en que el Ministerio de Industria tuvo conocimiento de que estaban a punto de saltar a la opinión pública las presuntas irregularidades en las subvenciones a Telecable Gijón, Telecable Oviedo y Telecable Avilés por un importe global de 511 millones (sobre una inversión 7.331 millones y la creación de 119 empleos). La entrega se produjo en el transcurso de una reunión que había sido convocada en Industria para hacer un seguimiento de las actuaciones en el sector del carbón nacional. Según el portavoz oficial de Industria, la modificación había sido redactada al menos una semana antes. Los sindicatos forman parte del Instituto para la Reestructuración de la Minería del Carbón y Desarrollo de las Comarcas Mineras por lo que Industria está obligado a informarles. Las centrales tienen que dar su respuesta antes del día 17 de febrero.
La propuesta recoge que "la experiencia adquirida en el año 1998 (...) permite acometer una modificación de la Orden Ministerial de 6 de marzo de 1998 dirigida a perfeccionar y aclarar su contenido en algunos puntos concretos, manteniendo el resto de la disposición a la vista de los resultados obtenidos en su aplicación en el año 1998".
En concreto, Industria propone ahora modificar el punto cuarto de la orden. La del 6 de marzo excluía de las subvenciones mineras a "los proyectos comprendidos en el sector servicios" excepto aquéllos de fomento del turismo en las zonas en reconversión, siempre que no fueran bares, restaurantes o pequeños negocios.
Servicios, subvencionables
La nueva redacción del punto cuarto establece que "podrán ser objeto de ayuda los proyectos de inversión empresarial generadores de empleo pertenecientes a todas las actividades económicas, considerando la normativa de la Unión Europea de obligado cumplimiento en esta materia, con las siguientes excepciones: las de extracción y tratamiento del carbón y sus actividades auxiliares y los proyectos comprendidos en el sector servicios salvo aquellos que se considere que incorporan un cierto contenido industrial".Precisamente, la expresión "contenido industrial" ha sido utilizada por Industria repetidamente para justificar la subvención a las telecables asturianas, pese a que su actividad, formalmente, se encuadra en el sector servicios, así como a otras subvenciones (Pérez Villar, clínica oftalmológica Fernández Vega...).
Los responsables de las federaciones mineras de CC OO y de UGT, Rafael Barea y Víctor Fernández, respectivamente, han asegurado que la propuesta de ampliar las subvenciones al sector servicios en general ya fue planteada de forma unitaria por ambas centrales a Industria en febrero de 1998, un mes antes de que se aprobara la orden que se pretende modificar ahora, y fue rechazada. Industria niega esta afirmación y señala que la propuesta sindical de febrero pretendía que se subvencionaran "proyectos como discotecas y bares".
PSOE, IU y Nueva Izquierda volvieron a destacar ayer la gravedad de las irregularidades detectadas en las subvenciones de Industria. IU presentó en el Congreso la solicitud para constituir una comisión de investigación sobre las actuaciones de Piqué en Industria (el PSOE lo hizo el jueves). La socialista María Teresa Fernández de la Vega recordó que el Parlamento lleva tres meses esperando que se ofrezca una explicación razonable.
Mariano Santiso (IU) aseguró que el PP "da síntomas de anquilosamiento y de falta de reacción ante distintos casos de posibles corruptelas".
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