El Consell reclama "discreción" en el debate sobre una hipotética fusión entre Bancaixa y la CAM

Mientras el presidente de la Junta de Andalucía, el socialista Manuel Chaves, se destapó el jueves con un compromiso político de impulsar la fusión de todas las cajas de ahorro andaluzas, y Caja Madrid pretende asociarse a La Caixa, el Gobierno valenciano reclama prudencia y encomienda esta decisión a los órganos de gobierno de Bancaixa y CAM. El presidente de la Generalitat dijo que la estrategia del Banco de Valencia, Bancaixa y la CAM "funciona bien", con una política de participación en empresas y entidades de primer orden en España.

El presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana no quiso comprometerse ayer en el tema, aunque señaló que sería "un error" descartar alianzas interregionales. Al presidente le parece evidente que en el mundo de las finanzas existan movimientos encaminados a las fusiones entre bancos y cajas de ahorro. "Yo seré siempre respetuoso, a más no poder, con las decisiones de los órganos de gobierno de estas entidades , y desde luego si habláramos en el futuro o tuviéramos que hacer alguna operación con las cajas valencianas o con otras foráneas, no sería un tema que pudiera comentar porque sería una gran irresponsabilidad desvelar alguna información en ese sentido", manifestó. Al igual que señalara el día anterior el consejero de Economía, José Luis Olivas, el presidente no puso reparos a que las fusiones de las cajas valencianas fueran más allá de las tres provincias y se plantearan alianzas interregionales. "No hay que tener pegas en esto, porque sería un error", dijo. Situado en el terreno político, el presidente del Consell consideró "negativo" abrir el debate en estos momentos. "La discreción es fundamental", señaló, "y más a cuatro meses de unas elecciones, cuando todo el mundo dice, enreda e intenta sacar partido de todo". "Lo que hay que hacer es hablar lo menos posible, sabiendo que lo que digas siempre se va a utilizar en tu contra, como en las películas", concluyó. En cualquier caso, para el Consell la estrategia marcada por el Banco de Valencia, Bancaja y CAM "funciona francamente bien", con una política inteligente de adquirir participaciones en empresas y entidades que tienen influencia de primer orden en España. "Es una estrategia muy acertada y nos podemos sentir satisfechos porque estamos, en cuanto a influencia, compartiendo liderazgo con Madrid y Cataluña", apuntó el presidente. Aunque fuera del orden del día, la posible alianza entre las dos cajas valencianas ha gravitado sobre las 8ª Jornadas de Cajas Rurales y Cooperativas de Crédito Valencianas, que ayer clausuró el presidente. Tras felicitar a las 41 entidades reunidas por la mejora de resultados registrada en el pasado ejercicio, Zaplana pidió a sus representantes un esfuerzo para resolver las incógnitas que depara el futuro al sistema financiero. Esas incógnitas vendrían dadas por el proceso de globalización de la economía, el euro, y la configuración de fusiones "que pueden generar algún problema a estas entidades de crédito", dijo Zaplana. El propio presidente trasladó a los representantes de las cajas rurales algunas recomendaciones para superar los retos: colaboración estrecha entre ellas y uniones estratégicas para el lanzamiento de productos similares. "Eso no significa necesariamente fusiones", advirtió, "porque también se hacer el mismo producto manteniendo cada uno su personalidad, pero lo que sí digo es que el movimiento cooperativo debe seguir existiendo porque cumple un papel económico y social importante", señaló.