Más de la mitad del personal secunda la huelga contra la gestión de Villalonga

Varios miles de trabajadores de Telefónica se manifestaron ayer en el centro de Madrid, coincidiendo con la segunda huelga de 24 horas convocada este año por el comité intercentros en demanda de una mejora de las relaciones laborales en la empresa. Los sindicatos convocantes aseguraron que un 85% de la plantilla de Telefónica secundó la huelga, un 10% más que en la jornada de protesta celebrada el pasado 14 de enero. La dirección de la empresa situó esa cifra en el 55%, frente al 45% que secundó los paros en enero, según sus propias valoraciones. El comité intercentros, formado por UGT, CCOO, UTS, CGT y SATT, reclama un pacto de estabilidad de plantilla y un plan de empresa en el que se fijen las prioridades estratégicas de la dirección para los próximos años, consensuado entre el equipo gestor y los representantes de los trabajadores.

Los sindicatos estiman que 52.000 personas trabajan actualmente en Telefónica, frente a los 55.000 empleados que tenía la compañía poco antes de acabar el año 1998, y achacan el recorte de plantilla de los últimos meses a la presión que ejerce la dirección sobre los trabajadores con 52 años o más para que se acojan a los planes de prejubilación que ha puesto en marcha. La dirección de Telefónica, que se propone situar la plantilla en 45.000 personas en el entorno del año 2000, niega esas presiones y cifra la indemnización media por prejubilación en 38 millones de pesetas.

La empresa emitió ayer un comunicado en el que afirma que "los servicios ofrecidos por Telefónica no se han visto prácticamente afectados, pero por efecto de la huelga su calidad ha podido disminuir", y pide "disculpas" a sus clientes por la situación que, afirma, "no es achacable a Telefónica". El secretario general de CCOO, Antonio Gutiérrez, pidió a la dirección de la compañía la "inmediata reapertura" de negociaciones con los sindicatos sobre el futuro de la empresa.