Cinco muertos y decenas de casas sepultadas en un violento alud en los Alpes

Al menos cinco personas, entre ellas una niña pequeña, murieron y otras veinte resultaron heridas en una avalancha de nieve que se produjo ayer a mediodía en la localidad francesa de Tour, cerca de Chamonix, en los Alpes franceses. "Estaba lavando los platos cuando uno de mis hijos dijo: mira la nieve que baja. Un segundo después la teníamos encima", relató una superviviente. "Había un gran estruendo. No se oía nada. Las ventanas y las puertas fueron arracandas de cuajo", señaló otro. Testigos presenciales calificaron el estado en que quedó la población como "un pequeño apocalipsis" . La enorme masa de nieve, desplazada a una velocidad superior a los 300 kilómetros por hora, encontró en su camino ladera abajo más de veinte chalets que quedaron completamente sepultados.

Uno de los mayores problemas a los que se enfrentaban anoche los equipos de rescate era determinar el número de personas que se encontraban en el interior de las construcciones en el momento del accidente. "Algunas de las casas han quedado completamente pulverizadas", señalaba un bombero.

En los hospitales vecinos, especialmente en la localidad de Chamonix, se agolpaban los heridos de diversa consideración, aunque sólo cinco presentaban un estado grave. El riesgo de nuevas avalanchas en la zona obligó a evacuar a otras 200 personas en la misma zona de los Alpes franceses.

Un concejal explicó que la nieve bajó por la ladera con tal fuerza que tras atravesar un pequeño llano remontó la ladera contraria. Además de las viviendas, la avalancha destrozó un bosque vecino. Se trata del alud más importante registrado en la zona desde 1908.