Ruiz-Mateos se enfrenta a dos años de cárcel por amenazas
El empresario jerezano José María Ruiz-Mateos se sentó ayer en el banquillo de los acusados del juzgado penal número 5 de Madrid para responder de cuatro delitos de amenazas y uno de revelación de secretos, por los que el fiscal pide para para él un total de dos años de prisión. El fiscal solicita también un año y ocho meses de prisión para un hijo del empresario, José María Ruiz-Mateos Rivero, y ocho meses para el abogado Joaquín Yvancos. El fiscal acusa al empresario de haber amenazado a los presidentes del Banco Santander, del BBV y del Banco Zaragozano, así como al presidente de Prisa, Jesús de Polanco, con difundir informaciones supuestamente comprometedoras si no le compensaban por la expropiación de Rumasa.
Ayer, ante el juez, el empresario trató de sostener que todo se debió a "malentendidos" o a "rabietas del momento". En su opinión, intentar que los grandes bancos le compraran un hotel en Miami por cinco mil millones de pesetas no era sino pedir "unas migajas" tras la expropiación.
También negó que hubiese sido él quien hizo llegar a determinadas publicaciones cintas de conversaciones privadas grabadas al alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano y a Esperanza Aguirre. Sin embargo, aseguró que dispone de "bolsas enteras de cintas" aunque se negó a revelar la identidad de quienes se las han dado.
El hijo del empresario y el abogado Yvancos negaron haber entregado al presidente de Prisa, Jesús de Polanco, un "informe reservado" sobre su persona en una reunión en la que, según el fiscal y la acusación, intentaron que les pagasen los derechos de televisión del Rayo Vallecano como si estuviera en primera división.
