Gas Natural reanuda las obras del gasoducto de Galapagar al no hallar restos de la vía romana

Gas Natural reanudó ayer las obras del gasoducto entre las localidades de Collado Villalba y Galapagar, que fueron interrumpidas el pasado 14 de diciembre como medida cautelar hasta comprobar si los trabajos afectaban a una calzada romana, informó un portavoz de esta compañía.La empresa acordó con la Dirección General de Patrimonio de la Comunidad de Madrid la contratación de un equipo de arqueólogos, encargados de supervisar los trabajos y determinar si dañan algún resto de valor histórico. El grupo municipal socialista de Galapagar había denunciado ante la Comunidad de Madrid que el gasoducto había acabado con varios metros de calzada a su paso por el municipio. La Comunidad abrió una investigación para determinar si realmente se habían producido daños y paralizó de forma cautelar las obras. Según el portavoz de Gas Natural, el informe de los técnicos ha determinado que "las obras no han afectado en ningún momento a la calzada y no se ha comprobado que en el futuro la dañen". Recordó, además, el compromiso del director de la compañía en Madrid, Ramón de Luis, de poner todos los medios necesarios para evitar cualquier perjuicio y desviar, si es necesario, el trazado del gasoducto.

Este periódico no logró ayer confirmar en Patrimonio las afirmaciones de Gas Natural.

La XXIV vía Antonina, nombre con el que se conoce la calzada romana de Galapagar, está declarada bien de interés cultural, la máxima protección patrimonial que puede conceder la Comunidad de Madrid.

Esta vía, levantada en el siglo II, unía la zona de Alcalá de Henares con la de Segovia. Atraviesa de este a oeste la región y se hace aún visible entre los términos de Galapagar y Cercedilla. La Dirección General de Patrimonio realiza desde hace años un laborioso trabajo de investigación y recuperación de su trazado, que está obligando al desenterramiento de los tramos ocultos bajo toneladas de tierra.