Fomento aplaza la inauguración de la "pata sur" prevista para el lunes La autopista A-16 será cortada al tráfico tras las fiestas de Navidad

La pata sur no se inaugurará el día 28. Ni siquiera en parte, como era la intención del Ministerio de Fomento. Los enormes atascos originados hace unos días por el cierre de la autopista A-16 para ejecutar las obras modificaron el último calendario previsto por los responsables de carreteras del Estado en Cataluña: abrir el lunes la conexión de la pata sur con el aeropuerto de El Prat y posponer hasta después de las fiestas las obras para conectar esta nueva vía con la A-16. El Ministerio de Fomento ha decidido finalmente que todas las conexiones de la nueva carretera se hagan al mismo tiempo.

La pata sur debe unir las rondas de Barcelona con la autovía de Castelldefels y el aeropuerto, por un lado, y con la autopista A-16, por el otro. Para concluir las obras, Fomento decidió el pasado día 14 de diciembre cerrar al tráfico la autopista en el término de Sant Boi, pero tras varios días de atascos y de protestas airadas de los ayuntamientos afectados por esta medida, no tuvo otro remedio que echarse atrás y reabrir la autopista. Ante esta situación, Fomento optó por modificar parcialmente sus planes. La conexión de la pata sur con la A-16 esperaría hasta enero, pero el enlace con el aeropuerto y la autovía de Castelldefels estaría listo para su inauguración el día 28 de diciembre, tal como estaba previsto. Sin embargo, y pese a que este último enlace no ofrece problemas, Fomento ha preferido esperar a que el conjunto de las obras estén acabadas para inaugurar este polémico tramo cuya construcción se ha realizado con tal lentitud que viene ocasionando problemas y atascos desde hace varios años. Antes de la inauguración, sin embargo, todavía deberán superarse momentos difíciles. Después de Reyes, los responsables de carreteras del Estado en Cataluña se reunirán con la Generalitat y los ayuntamientos afectados por las obras de la pata sur -El Prat, Sant Boi, Viladecans y Gavà- para adoptar las medidas necesarias con el fin de que la reanudación de los trabajos no provoque el caos circulatorio que trajo consigo hace unos días. Seis años de retraso Dado que parece inevitable que la A-16 vuelva a ser cortada al tráfico, las reuniones entre las administraciones servirán para planificar las alternativas para desviar la circulación mientras la autopista permanezca cerrada. Eso sí, Fomento anuncia que los trabajos se reanudarán a un ritmo frenético, por lo que de entrada parece descartar la alternativa de cierres parciales, a determinadas horas o días, planteada por las autoridades locales de los municipios afectados. El último retraso en la construcción de la pata sur no parece de todas formas significativo si se tiene en cuenta que se trata de una carretera que, según las previsiones iniciales, debía haberse ejecutado en el año 1992. Dotada con un presupuesto de 10.000 millones de pesetas para la ejecución de las obras, se trata de una vía de seis kilómetros de longitud que nace en el nudo del Llobregat, entre los términos municipales de Cornellà y L"Hospitalet, en el punto en el que convergen la Ronda de Dalt y la del Litoral. A su paso por el municipio de El Prat, esta vía tendrá un tratamiento urbano. Por otra parte, la gran mayoría de los agricultores cuyos campos de cultivo resultaron afectados para construir la nueva carretera, alrededor de medio centenar, han denunciado que todavía no han cobrado las indemnizaciones pactadas. Los payeses han lanzado un ultimátum al Ministerio de Fomento en el que ponen de plazo el día 20 de enero. Si llegada esa fecha siguen sin cobrar, los agricultores han anunciado que emprenderán movilizaciones.