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Tijeras académicas

OFICIOSCARMEN MORÁN, Sevilla Hace 10 ó 12 años el rey Husein de Jordania llegó a Sevilla. En su agenda figuraba una visita a la Hispalense. Iba a ser investido Doctor Honoris Causa. "Nadie quería ponerle el traje académico así que decidieron llamarme a mí pero en la tarjeta identificativa ponía que yo era abogado. Dije que así no iba. Yo soy sastre". Fernando Rodríguez Ávila convenció a los responsables de protocolo de la Universidad y aún conserva la tarjeta de visita que le sirvió para acercarse al rey hachemí. Rodríguez Ávila viste a los personajes que la Universidad inviste desde hace 20 años. Hasta entonces las togas, puñetas y musetas se encargaban a Madrid. Los birretes aún los hace un sombrerero de Salamanca. Detrás de cada apertura de curso, cada acto de investidura o cada toma de posesión que se celebra en la Hispalense, está la mano de este maestro sastre, hijo y nieto del oficio. Con el corte y las puntadas de Rodríguez Ávila se acaba un saga que ha dedicado 110 años a cortar trajes. "Mi abuelo empezó en Avilés y mi padre trasladó el oficio a Sevilla el año de la Exposición Iberoamericana de 1929". El que ahora es sastre de la Universidad es también presidente del gremio de Maestros Sastres de Sevilla, la provincia que más artistas de la tijera tiene después de Madrid y ha sido el encargado de hacer el traje de maestrante que llevó el padrino de la boda del año, Cayetano Martínez de Irujo. Con la creación de la segunda universidad de Sevilla, la Pablo de Olavide, a este sastre le ha salido más trabajo. Él ha sido el encargado de hacer los trajes académicos de todo el claustro. "En total hago unos 12 al año". Los precios de estas túnicas oscuras con las mangas adornadas por los vuelillos y la museta de color sobre los hombros varían entre 65.000 pesetas y el doble. "Depende de si es tejido integral o alpaca natural o de si las bandas son de seda normal o de seda natural". Rodríguez Ávila sostiene que Sevilla "tiene un nivel técnico fabuloso" en este oficio que, según dice, vuelve a estar de moda porque la gente joven retoma poco a poco la costumbre de hacerse trajes a medida que nadie tenga igual. Pero a pesar de todo, de los cuatro grandes sastres que hay en la ciudad, ninguno tiene descendencia que quiera seguir con la costura. Cuando Martínez Ávila decida que ya no se cuelga la cinta métrica ni un día más, su colección de tijeras se quedará como símbolo de lo que dio de comer a su familia durante más de un siglo. Las enormes tijeras, sin embargo no las ha rescatado de los cajones de su padre o de su abuelo. "Me las han ido regalando cuando se enteraban de que las coleccionaba". Son unas enormes piezas de metal que casi alcanzan el medio metro. "Las hay árabes, del siglo XVI, y esa que está colgada de la pared me la regaló el director del museo de Artes y Costumbres". Esa de la pared es una reliquia del siglo XVI que perteneció al sastre del Cabildo Catedralicio Hispalense, a la sazón, Tomás Villota. "El oficio es muy difícil pero cuando se domina es un veneno, cada pieza que se corta es un reto", dice Rodríguez Ávila. "Pero me veo negro cuando tengo que hacerlos sin medidas", como el del Rey Husein "que es simpatiquísimo". El monarca jordano le preguntó cómo había logrado confeccionar el traje sin que él estuviera presente para las pruebas. "Lo hice porque en las embajadas nos proporcionan la talla y el peso y comparando fotografías en las que aparece con el Rey Juan Carlos que nos sirven de referencia".

El arco iris universitario

Todas las togas son negras aunque la nobleza de las materias primas les imprima la diferencia. Pero lo que realmente distingue a una Facultad de otra es el color de la museta que se coloca abotonada sobre los hombros como el manto de armiño de los reyes de cuento. Guía práctica para distinguir una investidura de otra. Malva: Psicología Blanco: Bellas Artes o Teología Azul cielo: Periodismo Naranja: Económicas Caldera: Ingenieros y Arquitectos. Verde oscuro: Comercio Verde claro: Veterinaria Amarillo: Medicina Rojo: Derecho Azul celeste: Filosofía Azul oscuro: Ciencias Morado: Farmacia.

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