EE UU aprueba el primer fármaco para tratar la hepatitis B
La autoridad sanitaria de Estados Unidos (la FDA) aprobó ayer la utilización de uno de los fármacos que suelen usarse contra el sida para un nuevo uso: el tratamiento de la hepatitis B. El Epivir, de los laboratorios Glaxo-Wellcome, se convierte así en el primer medicamento contra ese virus hepático, que infecta a más de 300 millones de personas en todo el mundo.El fármaco no se ha aprobado para todas las personas infectadas con el virus, sino sólo para las que ya han desarrollado la enfermedad. La dosis recomendada de Epivir -una tableta al día- suele ser bien tolerada por los pacientes.
Epivir, cuyo principio activo se llama lamivudina o 3TC, es uno de los fármacos más habituales para el tratamiento de los enfermos de sida, a los que suele administrarse en combinación con otras moléculas. Aunque no elimina el virus por completo, sí consigue retrasar o impedir que los pacientes de sida desarrollen los síntomas. El fármaco impide replicarse al virus del sida, y también al de la hepatitis B.
Según la Organización Mundial de la Salud, la hepatitis B es la novena causa de muerte en el mundo. Se trata de una infección crónica que puede conducir a la inflamación del hígado, y a veces al cáncer hepático. Más de un millón de personas mueren cada año en el mundo como consecuencia de enfermedades hepáticas causadas por el virus de la hepatitis B. Se contagia a través de fluidos corporales como la sangre y el esperma. También se puede transmitir de la madre al feto, y por compartir jeringuillas.
Según Heidi Jolson, directora de la división de fármacos antivirus de la FDA, la dosis de Epivir adecuada para tratar la hepatitis B es menos que la mitad que la usual para el sida, lo que podría disminuir los efectos secundarios del fármaco, que son bastante molestos.
Un problema añadido es que el propio fármaco puede dañar el hígado, por lo que el envase llevará la advertencia de que el paciente deberá tomar las tabletas bajo estricto control médico. Además, es conveniente que los usuarios se hagan la prueba del sida antes de empezar el tratamiento.
