"EA, los socialistas, EH e IU deberíamos sumar votos para hacer políticas progresistas"
Javier Madrazo (38 años), líder de Izquierda Unida-Ezker Batua, se muestra pausado en esta fría mañana de diciembre. Consciente de su escasa presencia en el Parlamento vasco, se ve más cerca de la oposición que del Gobierno y no espera sorpresas de Juan José Ibarretxe. Pregunta. ¿Ha recibido IU alguna propuesta, formal u oficiosa, para entrar en el futuro Gobierno vasco? Respuesta. Ha habido sondeos de unos y de otros para ver nuestra disponibilidad de participar en el Gobierno, pero no una propuesta formal de quien puede hacerla. Les hemos dicho que estamos siempre dispuestos con la condición de que haya un acuerdo programático serio, no sólo en pacificación, sino también en lo social. P. ¿Cuando habla de sondeos de unos y de otros, se refiere a PNV y a EH? R. Vamos a dejarlo así. P. En caso de que hubiese una propuesta formal para entrar, ¿cuál sería el papel de IU en un Gobierno con sólo dos parlamentarios en una Cámara de 75 miembros? P. Vamos a defender los intereses de los 71.000 hombres y mujeres que nos han votado; lo que nunca vamos a ser es la guinda de un pastel. P. Pero son conscientes de que tampoco pueden exigir mucho con dos parlamentarios. R. Tenemos 71.000 votos, 30.000 menos que EA; somos la tercera fuerza política del Estado que quiere ser coherente con sus electores. P. ¿No cree que la posible incorporación de IU puede ser un intento de presentar un Gobierno más pluralista y acabar con las acusaciones de frentismo y exclusión? R. No sé. No ha habido ningún propuesta concreta y, por tanto, son especulaciones. No sentimos ningún vértigo por estar en la oposición. Otros me da la impresión de que sí y que han hecho todo lo posible y lo imposible por estar en el Gobierno a cualquier precio, firmando lo que les pusieran sobre la mesa. Había cosas que no podían firmar porque comprometen al PSOE. Si no, hubieran firmado en blanco, porque parece que su supervivencia política depende de estar en el Gobierno. P. Pero, ¿cómo va a jugar IU con otro partido de izquierdas, el PSE, en la oposición? R. Me gustaría que el PSE diera un giro a la izquierda, pero no creo que sea capaz de desdecirse en poco tiempo de todas las políticas de derechas, antisociales, que ha hecho junto al PNV durante 12 años. El año pasado llegó a aprobar un presupuesto que apuntaba al déficit cero, y eso es una auténtica barbaridad en un país con las finanzas saneadas y unos problemas de desvertebración social, exclusión social y paro impresionantes. P. Parece que se presenta una legislatura con una oposición más fuerte y más movida, a priori. R. Eso, a priori. Lo que parece claro sobre el papel en la práctica no es tan claro. El PP en esta legislatura no ha hecho oposición, porque estaba atado por el pacto en Madrid con el PNV. Y el PSE no sé si va a estar esperando su oportunidad a junio [fecha de las próximas elecciones municipales] para ver si lo que no ha sido posible ahora es posible entonces. Hay que ver, hay que despejar incógnitas. P. El probable gobierno PNV-EA, con el apoyo de EH, ¿está más cerca de los postulados de IU que el tripartito de la anterior legislatura? R. A un gobierno hay que juzgarle por lo que hace y nuestros juicios van a ser a posteriori. Mi impresión es que, en materia de política social, va a haber una línea de continuidad. No veo a Ibarretxe con voluntad y convicción para hacer políticas progresistas y para imprimir un giro a la izquierda en este Ejecutivo. Me sorprendería muchísimo. Creo que EH va a supeditar su identidad nacionalista a su supuesta identidad de izquierdas. Y en políticas de vertebración del país, me temo que van a gobernar en clave nacionalista. La escuela pública no va a estar garantizada con estos partidos. P. ¿Ve factible que los presupuestos, que marcan la línea de un gobierno, se consensúen entre PNV y EH, con visiones económica y sociales totalmente contrapuestas? R. Primero vamos a ver si esos presupuestos se aprueban antes de junio o si lo dejan para después y prorrogan los anteriores. Si así fuera, sería señal clara de que EH quiere escurrir el bulto para que en junio no les pasen factura. Pero hasta ahora está demostrando que está aplicando la construcción nacional sobre la construcción social y para Ezker Batua son dos procesos indisociables. El autogobierno es válido en la medida en que sirva para imprimir políticas de solidaridad, igualdad y de justicia social. Si no, será válido para los sectores más privilegiados para la sociedad. P. Lo que ha sucedido con el IRPF, donde en Vizcaya se ha aprobado una enmienda con el apoyo de PSE, IU y EH, ¿cuántas veces se puede repetir? R. Es que hasta ahora los gobiernos se han conformado en torno al eje nacionalismo vasco o nacionalismo español, y sobre eso ha girado la política vasca. En torno a lo que tiene que girar es a la izquierda o a la derecha. ¿Por qué EA, PSE, EH y Ezker Batua no podemos juntar nuestros votos para hacer políticas progresistas? Deberíamos hacerlo, habría prácticamente una mayoría, a falta de un escaño. Para eso hace falta que EA, PSE y EH antepongan su interés de izquierda a cualquier otra consideración. P. Entonces, ¿cree que puede ser una legislatura con muchas sorpresas en el Parlamento? R. Lo que pasa es que al final la experiencia dice que EA y PSE votaron un montón de cosas que chocaban con lo que decían defender. Se permiten el lujo de, durante tres años y seis meses, hacer justo lo contrario de lo que dijeron que iban a hacer y en los seis últimos meses, con una buena campaña de publicidad y dos gestos de cara a la galería, recuperan una imagen supuestamente progresista. Da la impresión de que ciertas políticas y las incoherencias de los partidos no les pasan factura en las urnas. Es triste, pero es así, y al final la gente vota por otros criterios y sus intereses inmediatos, el bienestar, la calidad de vida, no son un elemento central a la hora de votar. Y algunos partidos juegan con esto. P. ¿Sigue manteniendo, mes y medio después de las elecciones, que su electorado no entendió el mensaje durante la campaña y que a eso se debe el retroceso electoral? R. Creo que nuestro electorado sí entendió nuestro mensaje. Eso no implica que nuestro discurso sea incorrecto, cuando planteamos vertebrar la sociedad vasca para que tengamos cabida los nacionalistas vascos, españoles y los no nacionalistas; es una propuesta que tiene futuro. Creo que los proyectos se confirman no en unas elecciones concretas, sino en toda una trayectoria. Hay saber estar a las duras y a las maduras. P. La vuelta normalizada de HB a las instituciones es una buena noticia. ¿Pero no va a erosionar más el apoyo electoral a IU, que puede verse encajonada entre EH y el PSE? R. EH se sitúa en el nacionalismo radical y el independentismo. Tengo mis serias dudas de que vaya a defender posiciones de izquierda, con el apoyo que va a dar al PNV. Nosotros nos situamos en un espacio que es la izquierda reformadora, en la que no se sitúa el PSE. P. ¿Se mantendría entonces la línea política de IU, si se repitiesen los malos resultados en las municipales de junio? R. No pasaría nada. Sería una mala noticia y seguiríamos trabajando con la misma ilusión y la fuerza que nos da la sociedad vasca. Un proyecto no puede estar a merced de dos elecciones. Somos corredores de fondo.
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