El paro crece un 0,3%, a pesar de los puestos de trabajo creados en la industria y la construcción
Noviembre volvió a traer desempleo a Andalucía. Los datos del Instituto Nacional de Empleo (Inem) reflejan que el paro aumentó un 0,3% en relación al mes anterior. Si en octubre el final de muchas tareas agrarias impidió la reducción de la tasa de paro, esta vez fue fundamentalmente el mal comportamiento del sector de servicios -que incluye el turismo-, lo que llevó al desempleo a 1.204 personas más durante el mes de noviembre. Aún así se trata de la mejor cifra de los últimos siete años gracias a los puestos de trabajos creados en la industria y la construcción.
La subida del desempleo registrada el mes pasado sitúa la tasa de paro andaluza en el 14,38% , de la población activa, -402.447 personas sin traba-jo-, más de tres puntos por encima de la tasa nacional. El número de parados respecto a octubre apenas aumentó en 826 personas -un 0,05%-, en todo el país. El mal comportamiento del sector de servicios explica en gran parte el aumento del 0,3% del desempleo en la región. En este sector, el paro creció un 1%, frente al estancamiento en la agricultura, y el descenso registrado en la construcción y, sobre todo, en la industria, donde bajó un 1,17%. En un comunicado, la Consejería de Trabajo se agarró a los buenos datos en estos dos sectores -"los menos sometidos a la estacionalidad"- y a la comparación anual - "el aumento más bajo en los últimos siete años"-, para hacer una lectura positiva de las cifras de noviembre. En relación a 1997 el desempleo se ha reducido en más de 46.000 personas. No todos hicieron la misma interpretación. "Andalucía es donde menos incidencia está teniendo la reforma laboral", aseguró el secretario general del Grupo Popular en el Parlamento andaluz, Antonio Sanz. La comunidad es, según los datos del Inem, la quinta en la que más creció el desempleo en noviembre. Los sindicatos CC OO y UGT coincidieron en considerar "malas" las cifras del paro y señalaron que la buena marcha de la economía -con una tasa de crecimiento superior al 3,5%- sigue sin traducirse en creación de empleo.
