Daimler-Chrysler indemnizará por la muerte causada por un 'airbag'

La empresa automotriz Daimler-Chrysler deberá pagar alrededor de 100 millones de pesetas a la familia de un niño de cinco años que murió tras inflarse el airbag del automóvil en el que viajaba como copiloto. Un juzgado de Nueva York ha determinado que el dispositivo de seguridad resultó ser "irrazonablemente peligroso" en el caso de la muerte del niño.El pequeño Michael Liz Crespo viajaba en una camioneta familiar cuando ésta chocó a una velocidad de entre 15 y 19 kilómetros por hora. La colisión provocó que se accionara el dispositivo de seguridad airbag, un colchón de aire que se infla a alta presión y con mucha fuerza frente al pasajero. El colchón golpeó el pecho y la cara del niño, lesionándole seriamente la espina dorsal, lo que le ocasionó la muerte. El juez determinó en un principio que la empresa del fabricante del vehículo debía pagar una cantidad superior, pero la redujo debido a que el niño viajaba sin cinturón.