Duran dice que los líderes carismáticos no tienen futuro en la política española

La era de los liderazgos políticos carismáticos, nacida en los años de la transición democrática, tiene fecha de caducidad. Y no muy lejana. Éste es el pronóstico de Josep Antoni Duran, presidente del comité de gobierno de Unió Democràtica y aliado de Jordi Pujol -un líder político de indiscutible carisma- en la coalición nacionalista Convergència i Unió (CiU).Duran abogó ayer, en una conferencia organizada por Tribuna Barcelona, por el inicio de una nueva etapa democrática basada no tanto en la fuerza de los liderazgos como en la participación ciudadana. El dirigente democristiano catalán, que precisó que sus palabras no se referían a ningún político en concreto, sino que eran fruto de una reflexión general, aseguró que el modelo de los líderes carismáticos no tiene futuro en la política española ni tampoco en la catalana. A continuación, agregó que los partidos agrupados en torno a un liderazgo de fuerte carisma con frecuencia suelen ser de escasa democracia interna. "La abundancia de carisma del líder", dijo Duran, "suele contrarrestar la falta de democracia interna".

Las palabras de Duran apenas tardaron tres horas en ser replicadas desde las filas de Convergència Democràtica, el partido de Pujol. El secretario general convergente, Pere Esteve, constató el carismático liderazgo de Pujol, tras lo cual aseguró que esa circunstancia no resta democracia interna a su partido. "Nadie ha de darnos lecciones en este terreno", dijo Esteve. "Convergència Democràtica es uno de los partidos con mayor democracia interna de todo el Estado y, por supuesto, de Cataluña".

Duran atribuyó la fortaleza de los liderazgos políticos en España a las circunstancias especiales de la transición de la dictadura franquista a la democracia. Pero apostilló que hoy, con la democracia consolidada y la incorporación de nuevas generaciones que siempre han vivido en libertad, ese modelo, igual que ciertas prerrogativas de los partidos, ya no tienen sentido.

El líder de Unió reiteró su demanda de reforma de la legislación electoral para que los ciudadanos puedan elegir directamente a una parte de sus representantes, no como ahora, que se votan exclusivamente listas cerradas hechas por los partidos. "La participación ciudadana está secuestrada por los partidos", dijo Duran, que pidió la aprobación de una ley electoral catalana en la próxima legislatura. "Con las listas cerradas, la fuerza no radica en la voluntad popular, sino en quien hace las listas. Las listas cerradas propician partidos oligárquicos".