Usabiaga dice que el Gobierno ya sabe quién debe ser su interlocutor en ETA

Fue una catarata de afirmaciones. Rotundas. Frías y con esa seguridad que da el creerse en posesión de la verdad. Rafael Díez Usabiaga, secretario general de LAB y diputado autonómico de Euskal Herritarrok por Guipúzcoa tras las elecciones autonómicas vascas del pasado 25 de octubre, lanzó ayer en Madrid su mensaje nacionalista amparado bajo el manto oportuno de Izquierda Unida.Lo de menos era que el representante del sindicato independentista vasco LAB hubiera aceptado la invitación de Izquierda Unida para recoger la propuesta de Iniciativa Legislativa Popular sobre la jornada semanal de 35 horas. Díez Usabiaga habló de ETA, del proceso de diálogo y de la conformación del próximo Gobierno vasco, del fin del conflicto y de autodeterminación. No eludió ni una sola pregunta.

¿La tregua de ETA es sincera? "El Gobierno es quien debe acreditar y profundizar si ETA tiene voluntad de acabar con la violencia. ETA tiene sus propios interlocutores y el Gobierno sabe cómo, de qué forma y con quién ha de hablar".

Será Euskadi quien decidirá su futuro y "el Estado tendrá que aceptar lo que el pueblo diga". De momento, en el nuevo Ejecutivo vasco no tienen que estar los socialistas. Sería, dijo, un factor de inestabilidad. "No estará el PSOE", afirmó rotundo. "Sería un paso atrás para todos los que han puesto su esperanza en Lizarra".

Dos fases para Euskadi

El Gobierno estará formado por el Partido Nacionalista Vasco y Eusko Alkartasuna, con el apoyo de Euskal Herritarrok. Díez Usabiaga antepuso el criterio nacionalista a cualquier otro, incluido el progresista. Al menos, en una primera fase. "Lo importante es sumar, aunque haya diferencias ideológicas", resumió.Porque el diputado de Euskal Herritarrok dibujó un proceso en dos fases para el País Vasco. En la primera, la de la resolución del conflicto, participarían todos los partidos. "También el PP y el PSOE. Todos", aclaró.

La segunda fase sería constituyente, con un estatuto en clave de soberanía. "El Estado tendrá que aceptar lo que decida Euskal Herria", advirtió. Sería "una segunda transición, ya que en su opinión, la primera no ha dado la democracia a Euskal Herria. "En esta segunda fase", afirmó, "aceptaríamos ser minoría siempre que no haya diques constitucionales".

Víctor Ríos, coordinador de Presidencia de Izquierda Unida, actuó como un perfecto anfitrión. Dejó hablar a su invitado sin interrumpirle. Asintiendo a veces. El coordinador general de la coalición, Julio Anguita, no estuvo en la reunión.