Los funcionarios denuncian a Justicia tras la caída de un techo en un juzgado

La junta de personal de los funcionarios judiciales de Barcelona acudió ayer al juzgado de guardia para denunciar por negligencia al Departamento de Justicia de la Generalitat a raíz de que el pasado lunes se desprendiese parcialmente, sin causar heridos, el falso techo del Juzgado de Detenidos número 2 de la ciudad. La denuncia asegura que en el mes de agosto ya se produjo un hecho similar y que la Generalitat, que es la responsable de los edificios judiciales, se comprometió a reparar los desperfectos, pero no lo hizo.

La causa que motivó la caída parcial del falso techo y de parte del forjado de obra fueron unas filtraciones de agua. Los juzgados de guardia, situados en la planta baja del número 1-3 del paseo de Lluís Companys de Barcelona, se habilitaron en 1992 justamente debajo de la terraza de un edificio de casi 30 años de antigüedad que, al parecer, no fue impermeabilizada al realizarse esas obras. El falso techo que se desprendió, según la denuncia de los funcionarios, ya se fijó en su día sobre otro falso techo de cañizo, sujeto por unos finos alambres. Entre ambos circulaban los tubos de climatización y el resto de las conducciones de las dependencias, que también cayeron. En el momento del desprendimiento no se encontraba en las dependencias ninguno de los ocho funcionarios judiciales que habitualmente ocupan esas oficinas, ya que las abandonaron momentos antes, al oír ruidos extraños en el falso techo. Un portavoz del Departamento de Justicia restó ayer importancia a la caída del falso techo y aseguró que en los próximos días se reparará por completo y que se impermeabilizará la terraza. El juzgado al que correspondía ayer la guardia realizó esta función en sus dependencias a la espera de la visita de la Inspección de Trabajo, que se realizará hoy. Los sindicatos con representación entre los trabajadores han solicitado que se efectúe una "profunda inspección" de todas las dependencias judiciales con techos falsos o grietas. Los funcionarios recuerdan en la denuncia que en agosto ya se desprendieron varias placas del mismo falso techo y que la Generalitat incumplió su compromiso de solucionar esas deficiencias. Según la denuncia, la empresa que realizó las obras de acondicionamiento, cuyo nombre y domicilio desconocen, es la responsable de un delito de negligencia, pero hacen extensible la acusación a la Generalitat porque está obligada por ley a garantizar la seguridad de sus trabajadores. Por otra parte, en el Juzgado de lo Penal número 22 de Barcelona tuvieron que retirarse ayer varias placas del falso techo porque había quedado inundado a causa de una gotera del juzgado decano, situado justamente en la planta superior. Clausura en Esplugues Los incidentes en los edificios judiciales no afectan sólo a Barcelona. Los tres juzgados de Esplugues de Llobregat fueron clausurados el pasado lunes por la Inspección de Trabajo porque los funcionarios sufrieron alergias, conjuntivitis y sequedad de garganta. El motivo de estos síntomas fue una desratización que se realizó el pasado 16 de octubre. Una semana después, la Inspección de Trabajo acordó el cierre a petición de la juez decana. La Generalitat, aseguran los funcionarios, realizó una limpieza a fondo de las instalaciones, judiciales, situadas en el llamado edificio Símbol, y el 12 de noviembre se volvieron a ocupar los locales. Sin embargo, al conectarse el aire acondicionado los funcionarios volvieron a sentir las molestias ya citadas.