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Más dormilones y con menos ropa

Un tercio de nuestra vida la pasamos durmiendo. Con esta premisa, la empresa zaragozana fabricante de colchones Pikolín, en su 50 aniversario, ha realizado 3.300 encuestas en otros tantos hogares para conocer los hábitos de dormir de los españoles y adecuar al máximo sus productos a las demandas del mercado. Ayer se presentaron los resultados del estudio en el País Vasco. Unas 300 parejas vascas han respondido a la exhaustiva encuesta, que arroja datos interesantes. Los vascos son los más dormilones, los que más valoran la importancia de descansar bien y los que disfrutan de las siestas más largas en España. La población vasca duerme diariamente unas 7,8 horas, frente a las 7,4 horas de media nacional, en días laborables. Eso sí, también son los que antes se acuestan y se levantan. Sólo el 14% de los vascos se va a la cama después de las doce de la noche, frente al 29% de la población española que lo hace. El despertador suena antes de las 8 de la mañana en el 56,2% de los hogares vascos, mientras en España la media baja hasta el 47%. Los días festivos, la situación cambia algo. Euskadi se coloca también a la cabeza en horas de sueño, con una tasa de 8,9 horas, pero se despierta más tarde que la media española. El 56,3% de los vascos se levanta de la cama después de las diez de la mañana, según el I Informe nacional sobre el sueño. A la hora de la siesta, los vascos siguen siendo los más dormilones. Pese a que la tradicional cabezadita después de comer no está tan extendida en Euskadi como en otras comunidades, los que tienen esta costumbre se la toman muy en serio. La siesta de los vascos dura, de media, 74,7 minutos, es decir, cerca de hora y cuarto, frente a los 57 minutos que duermen los españoles tras la comida. Este dato les coloca en el primer puesto en la clasificación por autonomías. Tener la columna alineada, una buena circulación sanguínea y una temperatura adecuada son las tres reglas de oro para descansar. Los fabricantes de colchones lo saben bien, pero echan de menos que no haya esa "sensibilidad hacia el mundo del descanso", lamentó ayer Juan Ignacio Pérez Nievas, director de Marketing de Pikolín. "El objetivo de este estudio, el primero que se realiza sobre el sueño en España, es indagar en los hábitos de la población para mejorar el descanso de la población", explicó ayer Pérez. Televisión en la cama ¿Y qué hacen los vascos antes de dormir? Ver la televisión, leer y fumar. Por este orden. Por lo menos, así lo aseguran en la macroencuesta de Pikolín. El 41,4% de los vascos, casi nueve puntos más que los españoles, ve la tele en la cama, y un 38,3%, se acuesta con un libro, frente al 33% de los españoles. A la hora de fumar, los resultados de este estudio son similares en el País Vasco y España: algo más del 13% de la población fuma en la cama. La ropa que se utiliza a la hora de dormir es también objeto de estudio. El pijama y el camisón están menos extendidos entre los vascos que en la población española. En cambio, dormir en ropa interior o desnudo es la opción preferida por los vascos, un 14,8% de los cuales duermen ligeritos de ropa y un 8,6%, sin nada encima. Después de Baleares, el País Vasco es la comunidad más nudista en la cama. En España, sin embargo, sólo el 5,7% opta por quitarse toda la ropa para dormir y un abrumador 63,8% prefiere el pijama. El I Informe nacional sobre el sueño analiza también la cuestión de cuánto tiempo tardan los vascos en conciliar el sueños. Como media, tan sólo 19,5 minutos. En las camas españolas, sin embargo, no se duerme hasta que han pasado 21,6 minutos. Quizá por esta razón, la población vasca está entre la que menos relajantes y pastillas para dormir consume, con un porcentaje del 8,6%. En el otro extremo, se sitúan los gallegos que son los que más pastillas inductoras al sueño utilizan. La mayoría de las parejas vascas y españolas duermen en cama de matrimonio, pero un 6,2%, opta por dormir en camas separadas adosadas, un hábito que, en opinión del director comercial de Pikolin, "es un síntoma del nivel de concienciación de la gente". "El descanso es muy importante y cada persona necesita una cama adaptada a sus necesidades para descansar bien", aseguró. Ronquidos Los ronquidos son otro de los aspectos presentes en el estudio. Según esta encuesta, a la que han respondido unas 300 parejas vascas, sólo el 23,1% de los vascos encuestados admiten que roncan, frente al 38% de la media española. Sin embargo, cuando se le pregunta a la pareja si el entrevistado ronca, la realidad aflora y el porcentaje de los que chirrían por la noche sube hasta el 29,2%. Por otra parte, los sueños buenos superan a los malos en Euskadi. Sólo 1,4% de los vascos sufre habitualmente pesadillas (en España, el porcentaje sube hasta el 1,9%) y por norma general sueñan más cosas positivas (4,11%) que la media nacional (3,6%). Dormir es la tercera cosa más importante para los vascos, sólo superada por una vida sentimental gratificante y por la satisfacción en el trabajo. Un 78% considera fundamental para su calidad de vida descansar bien, pese a que esperan 9,7 años para renovar la cama, frente a los 8,3 años que tardan los españoles. Asimismo, en el País Vasco se invierte de media 23.201 pesetas en el colchón, cerca de 5.000 pesetas menos que las que gasta la población española.

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