Los sindicatos convocan para el 3 de diciembre manifestaciones y asambleas

Los máximos órganos de dirección de UGT y CCOO ratificaron ayer el preacuerdo alcanzado con el Gobierno sobre el contrato a tiempo parcial, y decidieron convocar para el 3 diciembre manifestaciones en las principales ciudades españolas y asambleas en las empresas para expresar su protesta por otros desacuerdos con el Ejecutivo y la patronal CEOE. Las centrales discrepan sobre qué hacer mientras tanto, ya que CCOO quiere seguir negociando y UGT considera concluido este proceso de diálogo.

Los dos sindicatos van preservando a trancas y barrancas la unidad de acción. Las diferencias que se han puesto de manifiesto en las últimas semanas en las negociaciones con el Ministerio de Trabajo no se han resuelto. Tras un arduo debate entre sus direcciones sobre la fecha más conveniente para la convocatoria de movilizaciones, en la noche del lunes, sus líderes, Antonio Gutiérrez (CCOO) y Cándido Méndez (UGT), acordaron que sean el próximo 3 de diciembre.Los objetivos son reclamar la reducción de la jornada laboral a 35 horas para crear empleo y la mejora de la protección del desempleo, así como mostrar su rechazo a la reforma del IRPF, que consideran injusta para los más desfavorecidos. También coinciden en reclamar "el apoyo de las fuerzas políticas y sociales progresistas".

Pero a partir de ahí, la convocatoria de protestas supone, a juicio de Méndez, "dar por concluidas las conversaciones con el Gobierno" y dedicar todo el trabajo del sindicato a que las "movilizaciones sean un éxito". En consecuencia, no piensan acudir a más reuniones, salvo que el presidente del Gobierno, José María Aznar, haga una manifestación explícita que comprometa al Grupo Popular a modificar el presupuesto del Inem destinado a la protección del desempleo.

En cambio, Gutiérrez ve posibilidades de alcanzar otro acuerdo sobre los incentivos a la estabilidad del empleo y sobre la penalización en el abuso de la contratación temporal. Ayer aseguró que "CCOO pide, emplaza o exige al Gobierno" que resuelva la negociación iniciada, y no acepta que ese tema, que considera muy importante, sea "una decisión unilateral" del Ejecutivo.

Ese elemento de discrepancia tendrán que resolverlo en los próximos días, y deberán hacerlo compatible con el cumplimiento de las decisiones adoptadas ayer por el consejo confederal de CCOO (con 91 votos a favor y 19 en contra del sector crítico, que rechaza el preacuerdo sobre el contrato a tiempo parcial) y por el consejo confederal de UGT (con 150 votos favorables, 2 en contra y 2 abstenciones).

Los máximos órganos de dirección de las dos centrales, ambos de carácter extraordinario, creen que el preacuerdo ha permitido diseñar un nuevo contrato a tiempo parcial bueno y que equipara la protección social. Y, simultáneamente, han convocado protestas para mostrar su rechazo por los desacuerdos con el Gobierno sobre jornada, desempleo y fiscalidad, y para exigir a la patronal que acceda a la reducción de la jornada laboral para crear empleo, con carácter general y en los convenios.