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AULAS

El Sindicato de Estudiantes propone que los alumnos justifiquen sus faltas de asistencia

Las enseñanzas medias tienen un bajo nivel asociativo y sus representantes son universitarios

La Carta de Derechos y Deberes fue el desencadenante de una huelga estudiantil el pasado miércoles. El paro lo convocó el Sindicato de Estudiantes (SE) y volverá a repetirlo el día 18 de este mes. El sindicato basa en anteriores negociaciones mantenidas con la Junta su reivindicación de ser el único interlocutor válido para discutir con Educación el decreto de convivencia que la Consejería ha remitido al Consejo Andaluz de la Juventud para que sea debatido de forma conjunta entre todas las asociaciones allí representadas. "Que me enseñen una sola carta que haya mandado alguna asociación de las que están en el Consejo Andaluz de la Juventud intentando negociar o defender algo relacionado con la educación", reta Miguel Jiménez, secretario general del Sindicato de Estudiantes de Andalucía. El Sindicato, nacional, no tiene en la comunidad, un número alto de afiliados -"3.000 compañeros"- pero otros tienen menos y las pocas federaciones de estudiantes de enseñanzas medias han ido desapareciendo. La representación estudiantil -hay cerca de 700.000 estudiantes entre Educación Secundaria, Bachillerato, BUP, COU y FP- se limita ahora a asociaciones de alumnos en los institutos. Diferente es el caso del Circulo Andaluz de Estudiantes (CAE), con sede en Granada. Esta joven asociación de estudiantes de enseñanzas medias se constituyó hace apenas un mes y reúne a varios colectivos veteranos de todas las provincias andaluzas. La asociación no está adscrita a ninguna ideología política y su presidente, José Ramón Carmona asegura que "no es muy progresista, aunque tampoco conservadora". CAE está en desacuerdo con las movilizaciones convocadas por el SE contra el borrador de la Carta de Derechos y Deberes del alumno, al que acusa de no decir toda la verdad a los estudiantes. "Han utilizado el borrador como arma propagandística", señala su presidente. El CAE se muestra partidario de abrir una vía de diálogo con la Consejería de Educación para negociar los contenidos de la Carta. Un borrador en el que el Círculo echa de menos una mayor participación del alumnado en las comisiones de convivencia propuestas. Respecto a la política educativa de la Junta, el Círculo considera que "Pezzi ha vuelto a catear", porque con la LOGSE se ha producido un aumento del número de suspensos en selectividad. Carmona denuncia, además, que "el comienzo de curso ha sido nefasto por la falta de personal e infraestructuras". Es estos problemas que señala Carmona también coincide el líder regional del SE. Miguel Jiménez piensa que los asuntos educativos que debe atacar la administración con urgencia son "las infraestructuras, las plantillas de profesores, la falta de aulas de tecnología, laboratorios o, gabinetes psicopedagógicos", entre otros. Todo ello se soluciona con "un incremento de los presupuestos". Miguel Jiménez describe al SE como una asociación "de izquierda que intenta representar a los sectores menos pudientes de la sociedad". Dos sindicatos les han apoyado en las últimas movilizaciones, la Unión Sindical de Trabajadores de la Enseñanza de Andalucía (USTEA) y la CGT, ambos podrían definirse entre el panorama sindical como la izquierda de la izquierda. El SE ha propuesto un texto alternativo a la Carta de Derechos y Deberes elaborada por la Consejería en el que se reclama el derecho a la huelga sin castigo alguno. Con la normativa de la administración, donde no se recoge explícitamente este derecho, los estudiantes que van a la huelga serían penalizados con falta de asistencia a clase y la materia perdida podría darse por explicada. Para el SE, esto es injusto: "Ya es bastante con haber perdido un día lectivo en el que podríamos haber estado aprendiendo cosas". Sin embargo este celo con las horas de aprendizaje perdidas no tiene un reflejo coherente en la segunda petición que hace el sindicato: derecho a reunión en horas lectivas. Jiménez lo explica diciendo que "para los estudiantes es más pesado tener que ir y volver al centro para reunirse", por eso reclama que los encuentros sean en horario de instituto. Otra diferencia entre su Carta y la de la Consejería es la forma de justificar las faltas de asistencia. "Se consideran faltas injustificadas de asistencia a clase [...] las que no sean excusadas por escrito por el propio estudiante o sus representantes legales", dice el texto propuesto por el sindicato. ¿No es irresponsable que los propios alumnos justifiquen sus faltas de asistencia? "Nosotros también tenemos nuestras responsabilidades y si faltamos a clase debemos poder justificarlo, por ejemplo, si estamos enfermos, con un justificante médico", explica Jiménez. El sindicato pide además que las faltas de asistencia no impliquen castigo alguno mientras no se supere un 15% de faltas por cada asignatura al trimestre.José Manuel Moreno Presidente de la Asociación de Estudiantes del Instituto Emilio Prados (Málaga) Edad: 19 años Estudios. Repite COU por tercera vez Asociación: Es un ejemplo de las asociaciones sin federar que hay en los institutos. "Las federaciones de asociaciones no funcionan porque la gente joven tiene muy poco interés". "La Carta de Derechos y Deberes tiene algunos puntos reaccionarios".José Ramón Carmona Presidente del Círculo Andaluz de Estudiantes (CAE) Edad: 22 años Estudios: Estudia Ciencias Políticas CAE: En el Círculo Andaluz de Estudiantes están asociados "alrededor de 700 alumnos" de enseñanzas medias de toda Andalucía. El CAE ha pasado de ser provincial a ser regional hace apenas un mes y su presidente lo define como una asociación "no muy progresista pero tampoco conservadora".

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