Las comarcas de Barcelona podrían ser el próximo paso de los Mossos

El consejero de Gobernación de la Generalitat, Xavier Pomés, afirmó ayer en Igualada que el próximo despliegue de Mossos d"Esquadra podría ser a las comarcas de la provincia de Barcelona. Pomés manifestó: "Aún no está decidido, porque se está estudiando, pero las comarcas barcelonesas tienen bastantes posibilidades de ser el próximo destino de los Mossos". La planificación actual del despliegue de la policía catalana llega hasta el año 2000. Al final de siglo, los Mossos tendrán ya competencia en tránsito en toda Cataluña y se dará por terminado el despliegue en las provincias de Girona y Lleida. Ahora el Gobierno catalán debe decidir si el despliegue sigue por las comarcas de Tarragona o por las de Barcelona. Lo que está claro, afirmó Pomés, "es que en el Anoia, el Bages o el Vallès se necesita un modelo de servicios, unos recursos y un sistema de reclutamiento distinto al de comarcas como Alta Ribagorça". Pomés hizo estas declaraciones durante la inauguración del nuevo cuartel de la Policía Local de Igualada, un edificio de cuatro plantas que ha costado unos 170 millones de pesetas y que está situado en un solar de 1.200 metros cuadrados. El centro incluye celdas para cumplir arrestos de fin de semana que hasta ahora deben ser cumplidos en una prisión. El consejero defendió también sin reservas el papel de las policías locales ante el despliegue de los Mossos: "La policía catalana no tiene que ahogar a las policías locales, sino todo lo contrario: estos cuerpos municipales tendrán que asumir nuevos retos". Según el titular de Gobernación, los cuerpos de seguridad locales "no irán subordinados a, sino coordinados a". En este sentido, Pomés explicó que mientras en Girona la presencia de los Mossos fue acogida con silencio, en Lleida son recibidos con un "bienvenidos". El consejero dijo que los Mossos deben ser además una policía "reactiva".