San Fernando ordena su siesta

La mayoría de las ordenanzas municipales velan por el descanso de sus vecinos y prohiben hacer ruido desde la medianoche hasta las ocho de la mañana. El Ayuntamiento de San Fernando de Henares (30.000 habitantes), gobernado por Izquierda Unida, va más allá y, en su nueva ordenanza de Convivencia Ciudadana (que sustituye a la redactada en los primeros años de la democracia), pide silencio también en las horas de la siesta. El consistorio acota el resistero con exactitud: entre las tres y las cinco de la tarde y entre el 15 de junio y el 15 de septiembre.

Este artículo de la futura ordenanza provocó cierta controversia en el equipo de gobierno cuando fue redactado, según reconoce el edil de Seguridad Ciudadana, Valentín Martín (IU). "Había compañeros que estimaban que era poco europeo. Pero yo creo que es una sana costumbre española; en especial en los días de intenso calor. Hay que mantenerla", aseveró convencido.

Lo que no se puede hacer durante las horas de la siesta -ni de noche- es cantar o hablar en tono elevado, ni en la vía pública ni en el interior de los domicilios particulares. Tampoco se podrán abrir y cerrar ventanas con estrépito, efectuar obras y reparaciones, mover muebles o cualquier cosa que produzca más de 45 decibelios. Los vecinos que tengan personas enfermas en su domicilio, o donde residan trabajadores con turno de noche, podrán solicitar a los perturbadores de su duermevela que respeten la normativa. La Policía Local estará con ellos.

Enfoque progresista

La ordenanza citada se ocupa también de otros muchos asuntos. "Hemos pretendido conciliar las libertades de unos con los derechos de otros, pero con un enfoque progresista", se ufana Martín. El edil asegura que la normativa responde a quejas formuladas a diario por los vecinos de San Fernando. Así, la normativa municipal regula el disfrute de las zonas verdes, el uso de la vía pública, el consumo de alcohol y la publicidad referida al mismo, fijando sanciones que van de las 3.000 a las 10.000 pesetas. La mendicidad tampoco sale muy bien parada con la nueva normativa de este municipio del corredor del Henares. Los agentes de la Policía Local, tras informar a los mendigos de los recursos sociales disponibles para paliar su situación, les impedirán el ejercicio de esta actividad y les requisarán los efectos que hayan usado en la misma, según establece el texto, que fue aprobado en pleno municipal por unanimidad. La ordenanza está ahora en periodo de alegaciones.

Valentín Martín asegura que la mayoría de las personas que se dedican a la mendicidad forman parte de mafias organizadas y que, en los casos de auténtica necesidad, las limosnas no son una solución. El texto abunda en el tema afirmando que se dicta esta norma "al entender que corresponde a los poderes públicos garantizar las necesidades básicas de todos los ciudadanos".

De todas formas, si los mendigos persistiesen en su actitud, la Policía Local utilizará "todos los medios a su alcance" para hacer cumplir la normativa. La ordenanza prohíbe, además, la "mendicidad encubierta mediante el ofrecimiento de supuestos servicios", como puede ser la limpieza de los parabrisas de los coches. No obstante, no fija sanciones para los indigentes. Los agentes sólo actuarán con especial contundencia cuando se use a menores de edad para mendigar por San Fernando.