ESK-CUIS y Ezker Sindikala, escisiones de Comisiones, ratifican hoy su unión

Los sindicatos ESK-CUIS y Ezker Sindikala ratificarán hoy su unión. El escenario de la convergencia de los dos grupos, que comparten un pasado de pertenencia a Comisiones Obreras, será la Escuela Náutica de Portugalete. El tamaño de ambas formaciones es mínimo en el panorama sindical vasco y navarro, -ESK-CUIS aporta 5.000 afiliados y Ezker Sindikala, 550-, pero su peso específico en algunos sectores es mayor. Si en algún espectro político se podría situar la nueva formación, éste es, sin duda, el tercer espacio sindical. "En la práctica, somos un tercer espacio, aunque no por número de afiliados", comenta Juan Ramón Garai, veterano sindicalista de Ezker Sindikala, que rechazó la invitación de LAB a unirse a sus filas. Garai comparte con Ángel Abalde, uno de los pesos pesados de ESK-CUIS, la opinión de que están "más cercanos de LAB que de ELA" y también las discrepancias con la central vinculada al MLNV. "Con LAB tenemos diferencias en las manera de resolver los problemas del pueblo vasco, porque creemos que la pluralidad del pueblo vasco es muy respetable", explica Abalde. Las dos formaciones fusionadas han firmado la Declaración de Lizarra y han sido dos corrientes críticas dentro de Comisiones del País Vasco y Navarra. Los fundadores de ESK-CUIS abandonaron CC OO en cascada a principios de los años 80, mientras que la rama crítica Ezker Sindikala ha permanecido en el sindicato que preside Antonio Gutiérrez hasta principios de este año. "Comisiones ha dado marcha atrás en el tema vasquista y lleva una política de dejar las movilizaciones, de negociar sin presiones, que no compartimos", explica Garai. En el congreso que se clausura hoy los delegados votarán el programa de acción, renovarán 6 de los 14 miembros de la coordinadora de dirección y decidirán nombre del nuevo sindicato, que podría denominarse Ezker Sindikalaren Konberjentzia (ESK).