Aguas de Valencia sólo acudirá con Bancaixa a la privatización de Egevasa con la mayoría del capital

Bancaixa se presentará a los dos concursos para la privatización del 49% de Egevasa (Empresa General Valenciana del Agua) y de Girsa (Gestión Integral de Residuos) con dos sociedades de nueva creación. En el caso de Egevasa, Bancaixa cuenta con Aguas de Valencia (AVSA) como socio tecnológico, mientras al concurso de Girsa acudirá con Aguas de Barcelona (Agbar). AVSA no ha decidido aún si irá sola o acompañada al concurso. En el caso de que se dé el segundo supuesto, Saur, titular del 45% de AVSA, exigiría a Bancaixa una participación elevada en la nueva sociedad.

La Comisión Ejecutiva de Bancaixa, una representación reducida del consejo de administración, acordó anteayer crear dos sociedades nuevas con las que optar a la privatización de Egevasa y Girsa, propiedad de la Diputación de Valencia. La Comisión, presidida por Julio de Miguel, acudirá al concurso de Girsa con Aguas de Barcelona, que a través de una de sus filiales tendría un 40% de la sociedad que se presentará al concurso. Bancaixa suscribiría otro 20% y el 40% se lo repartirían cuatro constructoras, -Edifesa, Pavasal y Sedesa-. En el caso de Egevasa, Bancaixa pretende que su grupo y Aguas de Valencia se repartan el 60% del capital de la nueva compañía -no ha especificado la proporción- y el 40% restante está todavía por cerrar definitivamente, aunque se da por segura la participación de la constructora Lubasa (Luis Batalla, SA). Esta operación sorprendió ayer a Saur, accionista mayoritario de AVSA, dado que las relaciones con el Grupo Bancaixa son tensas desde que el pasado 30 de julio este último le arrebatara, con el apoyo del BCH, el control de AVSA. La decisión de Aguas de Valencia de acudir al concurso de Egevasa no sólo está tomada sino que la comparten los dos accionistas ahora enfrentados. El problema está ahora en que Saur sólo acudiría a ese concurso con la sociedad creada por Bancaixa si tiene la mayoría. En caso contrario, los franceses apuestan por que AVSA acuda sola a la privatización. De confirmarse este supuesto, el Grupo Bancaixa estudia acudir con Urbaser, filial de Dragados (Grupo BCH). Fuentes financieras estaban sorprendidas ayer por la ausencia del número uno en el tratamiento de residuos de la Comunidad, Agricultores de la Vega, una sociedad que pese a ser valenciana no entra en los planes trazados por el Grupo Bancaixa. El deseo del Ayuntamiento de Valencia y la Generalitat por "valencianizar" el capital de Aguas de Valencia, principal candidata para adjudicarse la gestión del agua potable de la ciudad durante 50 o 75 años más, no se extiende, hoy por hoy, a Girsa. La adquisición de Egevasa es tan importante para las compañías gestoras del agua potable porque es la antesala, el paso previo, para conseguir el contrato de agua potable de la ciudad de valencia durante más de medio siglo. Ésta es la auténtica joya de la corona para AVSA y para cualquier otra compañía que se dedique al negocio del agua. Ésté es también el detonante de la crisis accionarial que arrastra Aguas de Valencia desde hace unos meses. El mensaje es claro: Aguas de Valencia parece la más firme candidata a adjudicarse el contrato de suministro de agua potable del principal núcleo urbano de la Comunidad, un negocio seguro, sin riesgos; de ahí, la lucha entre los accionistas por el control de la compañía. La renovación de este contrato, que ya gestiona Aguas de Valencia, no se producirá, en todo caso, antes de las próximas elecciones autonómicas. Hay tiempo más que suficiente, dado que la concesión está vigente hasta el año 2002.