Pujol califica de "adecuada" la actuación del Gobierno de Aznar después del anuncio de la tregua de ETA

El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, defendió ayer la actuación del presidente del Gobierno, José María Aznar, y del Ejecutivo tras el anuncio de la tregua de ETA y el proceso de pacificación abierto en el País Vasco indicando que "están actuando de forma adecuada, después de unos titubeos iniciales poco afortunados". En declaraciones a la cadena SER, Pujol explicó que, en su opinión, Aznar cree que "esta tregua promete mucho" y que ambos coinciden en que "sería una barbaridad cometer actos que pudiesen poner en peligro" la tregua y el proceso abierto a raíz de este anuncio de la banda terrorista ETA. El presidente de la Generalitat también se refirió a la importancia de las próximas elecciones vascas, el 25 de octubre, indicando que éstas no "son como todas", sino que llegan "con un sobrepeso" porque se celebran en un "momento muy particular" y abren la puerta a un proceso posterior con muchas variables, entre ellas, la composición del Gobierno vasco. Asimismo, Pujol aseguró que el Parlamento vasco será el encargado de decidir lo que debe hacer Euskadi en el futuro. Esperanza Jordi Pujol insistió en que ve "con esperanza" el proceso iniciado por la tregua en el País Vasco y las repercusiones en España al afirmar que éste es "irreversible" y que "esto va a pesar más que los partidismos, temores y recelos", en referencia a las demandas nacionalistas y la polémica sobre una posible la reforma de la Constitución. El presidente de la Generalitat indicó que es "normal y lógico que cada uno organice su juego" con relación a las demandas nacionalistas, aunque consideró que no es "normal" la configuración de bloques contra los nacionalismos periféricos "que en realidad" suponen la "exclusión y volver a épocas de muchas sujeciones, aunque no a la dictadura", en alusión a la Declaración de Mérida, a la que no citó en ningún momento. Pujol reiteró sus demandas de un nuevo modelo de financiación y más poder político para Cataluña y las enmarcó en la Constitución española, indicando que la Carta Magna "permite vías y lecturas más autonomistas que posibilitan conseguir un poder político más amplio". Respecto a la postura divergente que el presidente del Partido Nacionalista Vasco (PNV), Xabier Arzalluz, ha mostrado al respecto, Pujol señaló que Euskadi y Cataluña son dos realidades "diferentes" y que por tanto ambos no hacen lecturas distintas. Pujol volvió a evidenciar en este punto las distintas lecturas del proceso autonómico que hacen el PNV y Convergència i Unió (CiU). Recordó que la Declaración de Barcelona, suscrita por el PNV, el Bloque Nacionalista Galego (BNG) y CiU, es perfectamente asumible desde una lectura abierta de la Constitución y añadió que son los documentos de trabajo los que contienen peticiones difíciles de asumir desde el PP y el PSOE.