El Estado indemnizará a la familia de una niña asesinada por un preso
El Tribunal Supremo ha condenado al Estado a indemnizar con 20 millones de pesetas a la familia de la niña Maruchi Rivas López, raptada, violada y asesinada en octubre de 1992, cuando tenía 9 años, por un preso en libertad condicional. Un auto del Supremo, que confirma una sentencia anterior de la Audiencia Nacional, considera a la Administración "responsable patrimonial" al no haber puesto el celo requerido en la vigilancia del asesino, que estaba cumpliendo condena por la violación de otra menor."Este fallo crea jurisprudencia", declaró ayer el abogado de la familia, Ricardo Pérez Lama, "ésta es la primera piedra para que los condenados por hechos violentos no obtengan la libertad condicional con ligereza, o si la obtienen, se pongan los medios precisos para controlarla".
El asesino, José María Real López, que tenía 28 años cuando sucedieron los hechos, raptó a la niña a la puerta de su casa, en una aldea próxima a Vilalba (Lugo), y tras violarla, la estranguló y la remató asestándole numerosas puñaladas. Real había sido condenado en 1985 a 12 años de cárcel por abusar sexualmente de otra menor, pero quedó en libertad condicional en el verano de 1992 al haber cumplido la tres cuartas partes de la pena. Tras ser detenido como autor del asesinato de Maruchi Rivas, la Audiencia de Lugo le condenó a 56 años de prisión. Durante el juicio, los peritos declararon que Real sufría una disfunción genética que le hacía propenso a la psicopatía. La familia de la niña entabló entonces un proceso civil para exigir al Estado una indemnización.
El fallo de la Audiencia Nacional, confirmado ahora por el Supremo, consideró que se había producido un "funcionamiento anómalo de la vigilancia tutelada" del recluso cuando éste quedó en libertad condicional. Según la sentencia, la Administración ejerció un "papel pasivo", ya que se limitó a requerir al padre de Real que firmase un escrito comprometiéndose a vigilar las actividades de su hijo.
El Estado ya ha puesto a disposición de la familia los 20 millones de indemnización. Los padres de Maruchi se declararon ayer satisfechos por la sentencia y explicaron que su propósito era que se reconociese la negligencia de la Administración. "A la niña ya nunca nos la devolverán", apostilló su madre, María del Carmen López.
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