La Casa de América se alía con Federico Luppi
El actor bonaerense Federico Luppi aparece estos días en la pantalal de la sala de proyección de la Casa de América. Ahora que es inminente la aparición en la cartelera de dos de sus películas, Bajo bandera y Frontera sur, la institución rescata dos títulos -uno poco divulgado; el otro, emblemático- de su carrera. El primero es Malayunta, cinta firmada en 1985 por José Santiso; el segundo, Últimos días de la víctima (1982), marcó un punto de inflexión en la carrera de Luppi junto al director Adolfo Aristaráin, un tándem que se repetiría en Un lugar en el mundo y Martín (Hache).Tal vez con el permiso de Héctor Alterio, Luppi se ha consolidado como el mejor intérprete que ha dado el cine argentino. Ya entrado en los 60, su barba blanca reluce no sólo en la filmografía de su país, sino también en títulos tan alabados como Hombres armados, la última entrega, hasta la fecha, de John Sayles.
La sala de proyecciones de la Casa de América siempre es un buen rincón para descubrir joyas del otro lado del Atlántico. El resto de esta semana, por ejemplo, se consagra al cine chileno, con La flaca Alejandra, de Carmen Castillo (jueves 1), y Chile, la memoria obstinada, de Patricio Guzmán (viernes 2).
Cine en la Casa de América. Pº Recoletos, 2 (metro Banco). 19.30. 1.000 pesetas (bono 10 películas).
