El municipio pagará casi el 50% más por recoger la basura de los barrios céntricos

Fomento de Construcciones y Contratas seguirá recogiendo la basura de los 10 distritos de la almendra central de Madrid durante ocho años más. El pleno municipal adjudicará el contrato a esta empresa por 5.500 millones de pesetas al año (ahora pagaba sólo 3.800 millones por el mismo servicio, casi un 50% menos). FCC tendrá que esforzarse más en los próximos años, cuando se implante la recogida selectiva y haya en las calles dos contenedores distintos, uno para basura orgánica (restos de comida) y otro para inorgánica.

Los técnicos municipales ya han elegido a la empresa que se ocupará de recoger la basura de los distritos de Chamartín, Arganzuela, Fuencarral, Centro, Moncloa, Salamanca, Chamberí, Tetuán, Moncloa y Retiro en los próximos años. Será Fomento de Construcciones y Contratas, propiedad de Esther Koplowitz, que actualmente ya se ocupa de este servicio municipal.El nuevo contrato lleva un complemento multimillonario. A partir del año que viene, recoger la basura en estos distritos, que ahora cuesta 3.800 millones de pesetas, valdrá 5.500, casi un 50% más. En total, el contrato adjudica a FCC la recogida de desperdicios por ocho años y un total de 44.000 millones.

La subida responde, según apuntan los concejales de Medio ambiente y de Limpieza, Adriano García-Loygorri y Luis Molina, respectivamente, a que, a lo largo de estos ocho años, la empresa irá incorporando el sistema de recogida selectiva a toda la capital.

Dos bolsas de desperdicios

Este método, que actualmente sólo se ha implantado en Moratalaz, consiste en que los vecinos utilizan dos bolsas, una amarilla con los envases y los plásticos y otra para el resto de la basura. Estas bolsas van a contenedores diferentes y los camiones tienen que encargarse de ellas de manera distinta: los envases se reciclan y el resto de los desperdicios va a la incineradora o al vertedero. En el año 2000, esta práctica debe extenderse a toda la ciudad.FCC ha competido en la adjudicación de este contrato con Cespa, que se encarga de la recogida de basuras en Vitoria.

La oposición municipal reconoce que la oferta de la empresa de FCC era la más barata, pero denunció que la compañía de Esther Koplowitz ganó también el concurso de recogida de la periferia en 1994. De hecho, FCC lleva ocupándose de los camiones de la basura de la capital desde hace más de 25 años. "Y este monopolio puede ser peligroso; si se convocase una huelga, Madrid quedaría sin recogedores de basura y habría que apelar al Ejército", señala Rafael Merino, del PSOE.

Además del precio, en la oferta se han tenido muy en cuenta los adelantos técnicos ofertados. A este respecto, FCC se ha llevado el gato al agua con un camión de 1,8 metros tan sólo de ancho que, con este tamaño, maniobrará con facilidad en las estrechas calles del centro. Entre los especialistas se denomina "camión satélite".