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X BIENAL DE ARTE FLAMENCO

Los sentimientos de dos directores

Margot Molina

"Mucho sentimiento dentro". Eso es lo que puso José Antonio, director de la Compañía Andaluza de Danza (CAD), en su Vals patético, la coreografía que presentó el pasado miércoles en el teatro de la Maestranza de Sevilla, dentro de la Bienal de Arte Flamenco. Un sentimiento que el público recibió y transformó en aplausos. José Antonio interpretó esta pieza -que sólo ha podido verse antes en el estreno el pasado junio en el Festival Internacional de Música de Granada- junto a Aída Gómez, directora del Ballet Nacional de España. "Un duelo entre un hombre y la muerte en el que he plasmado la dimensión más universal de Lorca", explica José Antonio. La voz del cantaor Enrique Morente desgranó los versos de García Lorca, Pequeño vals vienés, con la música de Leonard Cohen. "La mezcla es explosiva, pero el conjunto es estupendo. Tiene un toque naive", le comentaba una aficionada a su compañero de asiento. La estética de Vals patético causó sensación entre el público del flamenco, acostumbrado a espectáculos sin escenografía y en los que no se presta demasiada atención al vestuario. Cuatro espejos con marcos negros y voluptuosos, movidos por otros tantos bailarines que encarnaron al séquito de la muerte, sirvieron para crear la ilusión de las puertas de la muerte. El sugerente vestuario, del diseñador Jesús del Pozo, hizo otro tanto para crear el ambiente. "Es un ballet de sensaciones e imágenes que requería la presencia de Aída, porque el papel de la muerte está lleno de sentimientos contrarios que sólo ella puede recrear", comenta José Antonio, muy contento porque la nueva -y más joven- directora del Ballet Nacional de España aceptara su invitación. "Todavía considero a José Antonio mi maestro y bailar con él es una experiencia estupenda. Me transmite seguridad en el escenario", comentó Aída Gómez que formó parte del Ballet Nacional de España cuando lo dirigía José Antonio. El programa de la Compañía Andaluza de Danza incluyó también otras dos piezas que ya se habían visto en Sevilla. Latido flamenco, una coreografía de Manolete en la que se suceden seis palos y carece de argumento, y Cosas de payos, la creación de Javier Latorre basada en las fases que atraviesa un artista a lo largo de su vida y en la que suena, grabada, Fantasía de cante jondo, de Enrique Morente y Antonio Robledo. Flamenco evolutivo La buena reputación que ha conseguido la Compañía Andaluza de Danza se revalidó ayer con su participación en la Bienal con un programa en el que hubo para todos los gustos. Desde el más apegado a lo clásico, que encontró flamenco puro en el trabajo de Manolete, hasta los partidarios de introducir en el baile teatralidad e innovaciones, algo que hace Javier Latorre. Es decir del "flamenco evolutivo", que es como llama José Antonio al trabajo de Latorre. Además de esta intervención en su coreografía, el director de la CAD subirá al escenario del teatro Lope de Vega el próximo lunes, en el espectáculo de Javier Barón. "Es sólo una pequeña colaboración", explicó. El programa que, sin Vals patético, la compañía ha ofrecido fuera de España ha demostrado que se gana siempre al público. "Todos bailan muy bien, pero creo que el conjunto le resta individualidad al flamenco", comentaba un experto durante el descanso del programa. La Compañía Andaluza de Danza es una de las ocho representaciones que la Consejería de Cultura aporta a la Bienal de Arte Flamenco.

"Los andaluces son más puristas que los extremeños"

El Hotel Triana, uno de los escenarios más auténticos de la Bienal de Flamenco, entrará hoy en juego con su primer espectáculo: Extremo puro, un paseo por los cante de Extremadura de manos de sus protagonistas que, en la mayoría de los casos, trabajan más en Madrid que en su tierra. Así le ocurre a Ramón Suárez El Portugués (Mérida, 1947), continuador de la saga de su tío Porrinas de Badajoz, y uno de los artistas que encabezan el cartel. Pregunta. ¿Existe alguna diferencia entre el flamenco andaluz y el extremeño? Respuesta. Todo es flamenco, pero sí que hay diferencia en los estilos. Nosotros tenemos menos cantes,sólo el jaleo y los tangos extremeños. Además, los andaluces son más puristas que los extremeños. P. En Andalucía no se conoce demasiado el flamenco de su tierra... R. No mucho. Nosotros tenemos a mucha gente que canta bien pero, desde luego, la cátedra del flamenco está en Andalucía. Yo, para las soleás o las seguiriyas tengo que oír a Manuel Torres, Mairena o Caracol. P. Usted lleva muchos años cantando y sin embargo sólo ha grabado dos discos, ¿por qué? R. Era un hombre muy irresponsable y anárquico para hacer las cosas, un poco rebelde. Me enfadaba con las casas de discos y los dejaba plantados pero, gracias a Dios, ahora he cambiado e intento hacer bien las cosas. P. Usted fue todavía testigo del flamenco de cuarto, ¿ha perdido algo al ofrecerse en grandes espectáculos? R. Yo he estado en los cuartos y, cuando era muy joven, pude oir a los grandes. Aquello tenía mucha magia, pero ahora el flamenco ha ganado en profesionalidad. P. Pertenece a una familia de artistas ¿han seguido todos sus hijos en el negocio? R. De cinco que tengo, cuatro sí. Conmigo saldrá El Sabu, a la percusión, y puede que suban al escenario Ramón Porrina y El Paquete.

El autor del logotipo de la Bienal estudia interponer una demanda por la alteración de su trabajo

El diseñador Enrique Acosta, autor del nuevo logotipo de la Bienal de Arte Flamenco, está estudiando demandar al Consejo Asesor de la Bienal por lo que él considera un "atropello a la propiedad intelectual". Acosta, un profesional que lleva 30 años en el diseño, se queja porque han manipulado su obra sin consultarle. "Mi logotipo se presentó públicamente como la nueva imagen de la Bienal y, puesto que lo han cambiando sin mi consentimiento, no quiero que la gente piense que lo que se está imprimiendo en toda la cartelería del festival es mi trabajo", explicó ayer Enrique Acosta, uno de los profesionales andaluces con más prestigio en el sector que es autor, entre otras, del primer logotipo de Canal Sur, de la campaña del Servicio Andaluz de Salud y de la realizada para el proyecto Extremadura en clave 92. El Consejo Asesor de la Bienal, integrado por miembros del Ayuntamiento de Sevilla, la Consejería de Cultura y el Ministerio de Educación y Cultura, entre otros, convocó el pasado enero un concurso público restringido y seleccionó el trabajo de Acosta. "Lo que han hecho con el logotipo es dejarlo plano, sin resonancia. Le han quitado niveles de significación y lo han vulgarizado de tal manera que ha quedado apto para una promoción de cualquier gran almacén", se lamenta Acosta, profesor de Diseño Gráfico en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Sevilla. "Cuando lo vi impreso por primera vez les llamé para que rectificaran y me prometieron que lo harían, pero no ha sido así". Acosta muestra su preocupación por el tratamiento que en Andalucía recibe su profesión y asegura que "cosas como ésta" no ocurrirían en otras comunidades españolas. "No me parece ético que un colega se ofrezca para hacer un trabajo gratis con tal de acumular currículo y, además, lo haga pisoteando el trabajo de otro profesional", dice el diseñador refiriéndose al equipo que ha alterado su logotipo sin su consentimiento. Acosta cobrará -todavía no lo ha hecho- un total de 650.000 pesetas por su trabajo.

Llegan los versos jondos de Enrique Morente

El cantaor Enrique Morente presentará hoy su Poema de cante jondo, un montaje que se nutre del duende que Lorca encontró en el flamenco, de lo que él llamó "soníos negros".

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Sobre la firma

Margot Molina
Ha desarrollado su carrera en El PAÍS, la mayor parte en la redacción de Andalucía a la que llegó en 1988. Especializada en Cultura, se ha ocupado también de Educación, Sociedad, Viajes y Gastronomía. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid. Ha publicado, entre otras, la guía de viajes 'Sevilla de cerca' de Lonely Planet.

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