Aznar descalifica la propuesta de pacificación de Almunia por "oportunista" y "unilateral"

El presidente del Gobierno, José María Aznar, está dispuesto a hablar con el secretario general del PSOE, Joaquín Almunia, de las propuestas que quiera hacer contra el terrorismo, pero "con seriedad y discreción". Aznar descalificó ayer ante la Junta Directiva Nacional del PP la forma en que Almunia realizó su propuesta de pacificación, el viernes, de manera "unilateral" y por sorpresa cuando hay contactos muy fluidos entre el ministro del Interior, Jaime Mayor, y la dirección socialista. A juicio del Gobierno, esta oferta "difícilmente se explica si no es por afán de protagonismo y notoriedad".

La sorpresa fue la nota dominante con la que Jaime Mayor Oreja acogió la propuesta que Joaquín Almunia lanzó el viernes sobre la pacificación en Euskadi. Precisamente, había conversado el martes con el secretario de Política Autonómica del PSOE, Ramón Jáuregui, sobre las medidas antiterroristas. Luego, el mismo viernes, éste le anunció que Almunia iba a hacer una oferta pública, pero su alcance sorprendió al ministro del Interior. En la reunión del maximo órgano directivo del PP, José María Aznar, que estos días ha permanecido en estrecho contacto con Mayor, descalificó la proposición socialista. En primer lugar, destacó su carácter "unilateral". Una oferta de este calibre, con la fijación de un plazo de caducidad para el ejercicio de la reinserción de los miembros de ETA, debe hacerse pública después de una consulta con los partidos democráticos y, especialmente, con el Gobierno, que es el que dispone del mayor caudal de información sobre la lucha antiterrorista, advirtió Aznar. A su vez, el coordinador general del PP, Ángel Acebes, resaltó ante la prensa la "contradicción" del PSOE, que criticó la "unilateralidad" de las relaciones del PNV con HB.El Ejecutivo sostiene que una propuesta semejante necesita previamente precisiones sobre sus consecuencias, como saber si debe suspenderse la actividad policial desde el momento en que se declara una tregua o qué hacer si se cumple el plazo de caducidad de la reinserción de los miembros de la banda armada y no deponen las armas.

Aznar también calificó de "oportunista" la oferta de Almunia. "Difícilmente se explica esta propuesta si no es por afán de protagonismo y notoriedad", manifestó Acebes, haciéndose eco de la opinión de Aznar.

El Gobierno cree que lo que subyace tras la propuesta de Almunia es la necesidad del PSOE de marcar distancias con el Ejecutivo en política antiterrorista ante la proximidad de las elecciones autonómicas vascas. E incluso de fijar una iniciativa propia ante la posibilidad de que ETA acabe declarando una tregua. Desde La Moncloa se recuerda que ya en junio el ex presidente Felipe González sorprendió con el aviso de la posibilidad de una tregua por parte de esa organización criminal.

Además, el Gobierno rechaza una tercera hipótesis, que es precisamente una de las causas por las que Almunia ha hecho su propuesta de pacificaciòn: el temor de los socialistas a que exista un reparto de funciones entre el Ejecutivo del PP y el PNV en la relación del partido de Xabier Arzalluz con HB. Esto es, que el Gobierno entrase en funcionamiento si el PNV y HB consiguieran una tregua de ETA. Ayer, Aznar recordó que "el PNV debe rectificar sus posiciones por el bien de la sociedad vasca y la lucha antiterrorista".

Este cúmulo de recelos mutuos está deteriorando las relaciones del Gobierno y el PSOE en la política antiterrorista. No obstante, Aznar reiteró ante el máximo órgano de su partido su interés particular por reunirse cuanto antes con Almunia para debatir la política antiterrorista común y "cuantas propuestas quiera presentar", pero "con discreción y seriedad".