Braulio Medel pide que se elimine la incertidumbre sobre el PGOU marbellí

El presidente de Unicaja, Braulio Medel, considera que es "conveniente que no haya incertidumbre" sobre el desarrollo urbanístico de Marbella, tras la paralización por parte de la Junta de Andalucía de la revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la ciudad. Medel estima que ésta es una cuestión que se enmarca en el ámbito administrativo y destacó la necesidad de que en Marbella exista seguridad jurídica "para que los aspectos económicos funcionen". "Esto no quiere decir que haya indefinición absoluta en materia urbanística", precisó el presidente de Unicaja, ya que actualmente está en vigor el plan general de 1986. "Y las entidades financieras no movemos de acuerdo a la normativa y el plan que haya". Medel agregó que aunque la inversión en turismo residencial marcha a "un ritmo positivo", el presidente de Unicaja abogó porque "en un futuro no demasiado lejano, las cuestiones pendientes se resuelvan". Medel recordó que no es la primera vez que la Junta paraliza un plan o que hay que hacer modificaciones sobre el que PGOU elaborado por un ayuntamiento. "Parece que el Ayuntamiento de Marbella sea el primero que ha planteado un nuevo plan y ha habido que hacer modificaciones. Normalmente, todos sufren un proceso de ajuste". "Tirando los trastos" Por otro lado, el alcalde de Marbella, Jesús Gil y Gil, lamentó ayer que los dirigentes del PP y del PSOE "se estén tirando los trastos" tras la polémica suscitada por la aprobación municipal del PGOU de la ciudad, que definió como un documento "perfecto y correcto". Durante su primera visita a Melilla para anunciar que presentará un candidato a la presidencia de esta ciudad autónoma, el regidor marbellí negó cualquier pacto con el PP, como ayer insinuó el presidente andaluz, Manuel Chaves, y dijo que "no entrará en el juego" de socialistas y populares. Gil insistió en que el PGOU es correcto "porque lo han dicho siete dictámenes jurídicos de los más importantes del país" y en que Chaves "ha sido un botarate que se ha bajado los pantalones por la banda de José Asenjo [dirigente socialista de Málaga]". "No se puede agredir a un pueblo utilizando un expediente administrativo que no tiene nada que ver con la realidad y obviando totalmente la Ley del Suelo, que es básica y de aplicación nacional", agregó Gil en rueda de prensa. Mientras, el alcalde de Benalmádena, Enrique Bolín, aseguró que Jesús Gil "no tiene contacto diario con el vecindario de Marbella" y que delega "casi todo" en el primer teniente de alcalde, Pedro Román. En una entrevista con Efe, Bolín considera que Gil "se ocupa más de las declaraciones" que de la gestión del Ayuntamiento de Marbella y destaca que aunque ambos son independientes, las actuaciones en estas dos localidades malagueñas son "totalmente distintas".