Ciencias de la hostelería

De todo se aprende. Al final, a Miguel Sánchez le van a resultar útiles las carreras por la banda de su currículum universitario: el año que cursó Psicología, las pocas asignaturas que aprobó en Económicas y la carrera de Derecho en la que por fin logró licenciarse. Nociones de psicólogo, de economista y de jurista le vendrán muy bien para asumir la tarea de gerente del Sport City, primer restaurante temático del deporte que se abre en Andalucía, un proyecto concebido por un grupo de socios entre los que figura el cantante José Manuel Soto. A ninguna de esas aventuras universitarias le dedicó tanto tiempo como al rugby este alumno de Letras que durante 15 años fue jugador del Ciencias y con el que lo ganó casi todo, incluido el honor de figurar en la edición española del Guinness como autor de más puntos en una sola temporada. Se cortó la coleta del rugby frente al Canoe madrileño dejando la estela de una treintena de partidos internacionales. Empezó a practicar este deporte en el Colegio Aljarafe y cuando llegó al Ciencias destacaban Bosco Abascal y Juan Carlos Neva, un biólogo que después sería director del parque de Grazalema. Su posición en el campo era la de apertura, un concepto inseparable de la transición política española. Ahora busca otro tipo de apertura, la de este local que se habría llamado Fair Play Café de no haber chocado con el obstáculo burocrático de estar patentado ese nombre por la UEFA. Sánchez fue alumno en Derecho del ex rector y maratoniano Javier Pérez Royo. Los esforzados atletas de la especialidad de los 42 kilómetros tendrán el menú Filípides en este local. Sus padres regentan un restaurante de comidas caseras en Gines; con sus socios, está en pleno proceso de casting de cocineros. Todos los deportes tendrán cabida en la decoración y en la dieta del nuevo local. Él mismo ha cambiado la magna arquitectura por las casas de muñecas: el jugador de rugby se aficionó al golf en una gira por Inglaterra y este fin de semana ha participado en Chiclana en un torneo del deporte favorito de Sean Connery. Miguel jugó un partido amistoso en el santuario de la selección escocesa, Murray Field, en Edimburgo. En el trofeo Cinco Naciones, este sevillano afincado en el Aljarafe tiene alma escocesa, pero se queda con el rugby que se practica en las antípodas, aunque sea menos conocido. "Los mejores han sido tradicionalmente los australianos, neozelandeses y sudafricanos. Incluso Argentina llegó a tener mejor equipo que los participantes del Cinco Naciones". 15 años de jugador de rugby le dejaron secuelas de muchos amigos, alguna lesión y recuerdos imborrables como un partido entre el Monte Ciencias y el Salvador de Valladolid que acabó con empate a 28 puntos. Los 28 tantos del equipo sevillano los apuntó el gerente del Sport City. La labor de promoción del restaurante temático le ha llevado a ponerse en contacto con el representante de jugadores la Liga de la Estrellas como los brasileños Roberto Carlos y Denilsson, aunque quieren darle atención a los llamados deportes minoritarios. "El nombre definitivo del restaurante se me ocurrió viendo en Sevilla el campeonato mundial de gimnasia rítmica. Teníamos que elegir entre el modelo americano de NBA y famoseo, tipo Planet Hollywood, o el club inglés con solera, algo muy propio del mundo del rugby". El trabajo entre bastidores para poner en marcha su Sport City ha limitado sus vacaciones a cuatro días en Zahara de los Atunes.