"El riesgo de las ONG es limitarse a pedir dinero y no compromisos"
Con su título de economista todavía caliente consiguió trabajo en una multinacional. Durante dos años hizo predicciones financieras hasta que un día cayó en la cuenta de que iba por un camino demasiado convencional. Presentó su currículo en Médicos Sin Fronteras, donde no tuvo dificultades para entrar. Durante 10 años ha sido testigo de guerras, hambrunas y limpiezas étnicas. Nadie lo diría porque a sus 34 años Eric Stobbaerts todavía tiene mirada de niño. Desde mayo, dirige Médicos Sin Frontera en España. P. ¿Qué es más importante curar o denunciar? R. Las dos cosas. Aunque a veces es más importante denunciar para acabar con la pesadilla. P. ¿Las instituciones políticas hacen lo suficiente? R. Son pasivas y la forma de paliar el no hacer nada es utilizar la ayuda humanitaria. No actúan a nivel político, pero apoyan a las ONG para satisfacer a la opinión pública. Eso implica un riesgo, porque no cumplen su papel. P. ¿Alcanza el 0,7%? R. Los recursos nunca son suficientes, tenemos que seguir pidiendo más. Pero el riesgo de las ONG es limitarse a pedir financiación y no exigir actuaciones a nivel político. Hay que buscar compromisos políticos y morales. P. ¿El PP tiene ese compromiso? R. [Se sonríe] La ayuda humanitaria depende de la sociedad, no de un partido. Nuestra base de financiación son los donativos y eso nos permite ser independientes. Hay una sensibilidad reactiva ante determinadas emergencias. Nuestro trabajo es fidelizar a esa gente porque lo importante no es dar dinero un día y olvidarse. Tenemos que curar, denunciar y sensibilizar. Y ese trabajo tiene que ser menos visceral y más profesional. P. ¿Ha sentido ganas de tirar la toalla? R. Cuando los serbios entraron en Srebrenica, aquello era una prisión a cielo abierto. La ausencia de coraje para defender aquel enclave fue un acto de cobardía. Hubo más de 8.000 personas muertas o desaparecidas. En Líbano sentí miedo, pero sabes por qué estás ahí y ves que contribuyes a mejorar su día a día. Entonces relativizas ese miedo. Yo empecé por seis meses y fue como un virus. Desde que lo cogí no me ha dejado. Estaré quemado cuando una situación como la de Sudán no me haga llorar. Todavía no ha llegado ese momento. P. ¿Qué opina de la sanidad europea? R. Son las desigualdades del planeta. Me da pena la gente que no valora lo que tiene. Aunque también aquí hay un Cuarto Mundo. P. El trabajo de los cooperantes cada vez es más inseguro... R. Es consecuencia de la inercia de los gobiernos y de la comunidad internacional que no actúan para encontrar soluciones de paz. Las partes beligerantes no se sienten obligadas a respetarlos.
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