Un ex alcalde de Marbella cree que Gil ha cometido prevaricación

José Luis Rodríguez, ex alcalde de Marbella, aseguró ayer que la convocatoria por parte de Jesús Gil de un pleno en la madrugada del pasado día 7 en el que se aprobó el Plan General de Ordenación Urbana y todos los acuerdos que en él se tomaron "son nulos de pleno derecho y perseguibles judicialmente porque son objetos de prevaricación". Esta tesis la han defendido algunos juristas, que han sugerido a la Junta la posibilidad de querellarse contra Gil por la vía penal por prevaricación. Rodríguez, que presidió la corporación socialista que redactó el Plan General de Ordenación Urbana de 1986, dijo que Gil "no ha hecho un PGOU, sino que ha firmado convenios urbanísticos y los ha pegado al plan de 1986". Rodríguez afirmó que Gil "sabía que ninguna administración decente podía aprobar su revisión del PGOU y sólo le quedaba la confianza de aquellos constructores especuladores como él", con los que firmó convenios urbanísticos que significan "un dinero que en parte se paga al firmar, pero si no se aprueba el plan, no se cobra el resto", lo que "explica los nervios de Gil". Rodríguez calificó de "circo y farándula propia de Gil, para conseguir titulares y un golpe de efecto" la convocatoria de madrugada del pleno en el que aprobó el PGOU. Por otra parte, los promotores han dejado de solicitar licencias para construir en Marbella, según dijo ayer la portavoz socialista en este municipio, Isabel García Marcos. "Varios promotores y especuladores que han colaborado con Jesús Gil, cuando ven que se va contra la ley, han preferido parar y esperar a ver que pasa", dijo García Marcos, que añadió la Junta y los juzgados "deberían ser más rápidos y aplicar una medicina preventiva" ante las actuaciones de Gil.