Alcalá cierra una fábrica que había sido denunciada por malos olores

El Ayuntamiento de Alcalá ha decretado la clausura temporal de la fábrica Hermanos Vicioso, dedicada a la producción de grasas y proteínas animales, a causa de las cerca de 30 denuncias recibidas en el consistorio por los malos olores que emite. El edil de Medio Ambiente, Jesús Domínguez (PP), indicó ayer que las denuncias proceden de los comités de empresa de fábricas cercanas y que la empresa cerrada carece de la calificación ambiental que emite la Comunidad de Madrid, "que tiene la solicitud de la empresa, pero que aún no ha llevado a cabo la inspección necesaria". El gerente de la fábrica, Juan Cañamero, afirmó que la medida le parecía "desproporcionada", ya que, dijo, "no teníamos ni idea de que existían quejas por los malos olores". Cañamero aseguró que "las gestiones para la construcción y apertura de la fábrica comenzaron hace dos años, aunque estamos funcionando desde el pasado junio. Pagamos la licencia de apertura, pero aún no la tenemos, y la Comunidad de Madrid ha recibido nuestro expediente desde el Ayuntamiento, hace tres meses". La fábrica Hermanos Vicioso se encuentra en la antigua carretera N-II, kilómetro 26,500. Según Cañamero, se han invertido en la planta, en la que trabajan 30 personas, más de 1.000 millones de pesetas.