El Plan de Vivienda se acelerará en septiembre, anuncia la Comunidad

El Plan Regional de Vivienda va muy despacio, pero a partir de septiembre cogerá carrerilla. Así lo cree la directora general de Vivienda de la Comunidad, Amalia Castro-Rial, que ayer contestó a la denuncia del grupo parlamentario socialista según la cual sólo se habían gastado, en el primer semestre de 1998, 889.000 pesetas de los 2.740 millones presupuestados por el Gobierno de Ruiz-Gallardón para este plan de ayudas a la construcción y adquisición de pisos. Castro-Rial distinguió entre presupuesto "ejecutado" (el dinero efectivamente invertido) y presupuesto "tramitado o comprometido", el que está sólo pendiente de que el beneficiario presente la documentación necesaria para que se le conceda la ayuda.

Desde esta perspectiva, la directora general proclamó que ya se habían tramitado, a fecha de ayer, 1.338 millones de subvenciones, casi el 49% del total contemplado en el plan. "Lo que sucede es que nadie retira en agosto la documentación. En septiembre podrá comprobarse que el programa de ayudas para viviendas marcha mejor que en cualquiera de los cinco ejercicios presupuestarios anteriores", aseguró.

A ladrillo puesto

Estas explicaciones no lograron satisfacer al diputado del PSOE Juan Antonio Ruiz Castillo. "Eso es una excusa total y completa", adujo. E ironizó: "Qué brillantes eran Ruiz-Gallardón y Beteta [actual consejero de Hacienda] cuando analizaban nuestros presupuestos desde los bancos de la oposición. A ellos nunca se les ocurrió hablar de presupuesto comprometido. En este tema no valen los compromisos, sino los ladrillos que se hayan puesto". Por su parte, el consejero de Hacienda, Antonio Beteta, interrumpió brevemente ayer sus vacaciones para rebatir las críticas socialistas. Según Beteta, el líder del PSOE en Madrid, Jaime Lissavetzky, "sufre amnesia mezclada con los calores del verano" por omitir que 1998 es el ejercicio "con más elevada ejecución presupuestaria de toda la historia de la Comunidad de Madrid". El índice de ejecución a mitad de año es del 45%, tres puntos más que en 1997.

Sobre el compromiso con las políticas sociales, que el PSOE puso en entredicho, Beteta argumentó: "Hay partidas en 1998 que en 1994 ni siquiera se contemplaban en los presupuestos que gestionaba el Gobierno socialista. Es el caso del Plan contra el Sida, del Programa de Rendimiento Escolar o del Programa de Drogodependencias en Centros Educativos".

También se refirió el consejero regional a la buena marcha, a su juicio, del Ingreso Madrileño de Integración, que presenta en la actualidad 2.396 millones de pesetas reconocidos frente a los 1.725 correspondientes al ecuador del año en 1994.

Por todo ello, Antonio Beteta creyó ver "mala fe" en las acusaciones socialistas, "que pueden confundir a la opinión pública madrileña".