El PSOE pide que Martín Villa y Piqué aclaren la operación Enersis
La querella del Consejo de Defensa del Estado de Chile contra los ex gestores de Enersis que negociaron la venta del 32% del grupo a la española Endesa y el contradictorio cruce de declaraciones entre directivos de Santander Investment -entidad que dirigió la operación- sobre su papel en la compra han levantado sospechas. El PSOE solicitó ayer la comparecencia urgente en el Congreso del ministro de Industria, Josep Piqué, y del presidente de Endesa, Rodolfo Martín Villa, para aclarar el caso.
La iniciativa del PSOE coincide con la decisión de las autoridades chilenas, adoptada ayer, de que el caso siga en manos del Juzgado del Crimen número 33 de Santiago de Chile, que dirige la juez Eleonora Domínguez.La presidenta del Consejo de Defensa del Estado de Chile (el equivalente a la Fiscalía General en España), Clara Szczaranski, había solicitado esta misma semana el nombramiento de un juez especial para investigar las presuntas irregularidades cometidas en la operación de compra de Enersis, que supuso para Endesa un desembolso de alrededor de 200.000 millones de pesetas.
Aunque la querella de la fiscalía chilena se dirige directamente contra un grupo de ex directivos del grupo eléctrico encabezado por el empresario José Yuraszeck -sancionado por la Superintendencia de Valores por presunto uso de información privilegiada y que vendió sus acciones a Endesa a un precio 750 veces superior al del resto de accionistas-, en la misma se contempla también la posibilidad de que sea ampliada a "las demás personas que resulten responsables".
Esa simple frase desató los nervios entre algunos implicados en la operación en Chile. Así, mientras Endesa emitió un comunicado al día siguiente de que se presentara la querella en el que se felicitaba porque la acción legal no iba dirigida directamente contra la empresa ni contra ninguno de sus directivos, el director general de Santander Investment en Chile, Alonso Moreno, declaró públicamente que su entidad se había limitado a intermediar en la compra de acciones y que incluso Santander Investment había llegado a recomendar a Endesa que desistiera de la compra.
Alonso Moreno fue desautorizado el pasado jueves por el Santander, que calificó sus declaraciones de "personales", y reafirmó su apoyo a Endesa y al método seguido en la toma de control de Enersis.
A la vista de que el caso se complica -existe la posibilidad de que se presenten nuevas querellas de pequeños accionistas contra los responsables de la operación-, el PSOE solicitó ayer la comparecencia urgente en el Congreso del ministro de Industria, Josep Piqué, y del presidente de Endesa, Rodolfo Martín Villa, para que aclaren la situación.
En la nota hecha pública ayer, el PSOE asegura que la querella criminal interpuesta por la fiscalía chilena "y las reacciones contradictorias de los directivos de Santander Investment y de su filial chilena confirman que la operación se realizó de forma opaca y que se cometieron diversas irregularidades".
La polémica operación que ahora se investiga en Chile tuvo su inicio en la época en la que Endesa estaba presidida por Feliciano Fuster. Sin embargo, los contactos y las negociaciones con los directivos chilenos de Enersis no llegaron a fructificar. Sí lo hicieron a partir del relevo en la presidencia de la eléctrica española, cuando la asumió el ex vicepresidente del Gobierno Rodolfo Martín Villa. La toma de control de Enersis, el principal grupo eléctrico latinoamericano, culminó en agosto de 1997.
