La Comunidad prevé 50 millones para rehabilitar el frontón Beti-Jai en 1999
El frontón Beti-Jai es una instalación deportiva cuya construcción finalizó en el año 1893. Posteriormente sería declarada bien de interés cultural. Pero su estado actual de conservación es pésimo, no en vano su uso deportivo terminó en los años veinte. Desde entonces hasta ahora, sus 3.600 metros cuadrados de superficie sólo han servido para albergar diferentes talleres industriales. La Comunidad ha tomado por fin la decisión de adquirir y rehabilitar este monumento que se está cayendo en pedazos. La Dirección General de Patrimonio ya ha reservado un total de 50 millones de los presupuestos del próximo año para iniciar la rehabilitación del Beti-Jai.
La Comunidad no tiene claro todavía con qué empresas o sociedades contará para llevar a cabo la recuperación de este edificio que actualmente pertenece a la compañía francesa Sofib. Ni cómo se financiará la compra y reforma del frontón. Pero sí está decidida a iniciar las obras el próximo año. Aunque tenga que actuar en solitario. "Necesitamos un interlocutor que garantice la recuperación del frontón. En estos momentos se tantean varias posibilidades para recuperar no sólo el edificio, sino también el juego de pelota", declara José Miguel Rueda, director general de Patrimonio. "Una vez tomada esa decisión, será fácil estar jugando al frontón en un año", añade Rueda. Según él, las obras que requiere este espacio se pueden llevar a cabo a un "ritmo razonable".Patrimonio cuenta ya con un proyecto realizado por técnicos y arquitectos de la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento. Este proyecto evalúa el coste de la reforma de este edificio en torno a los 500 millones de pesetas. "Es un proyecto de restauración, pero hablamos también de darle un uso, aquél para el que fue concebido", declara Rueda. Añade que "desde hace casi 100 años este edificio se ha usado de forma incorrecta. Estamos haciendo gestiones para buscar un uso más digno a esta construcción. Por eso lo ideal es contar con personas que sean buenos interlocutores", declara el responsable de Patrimonio.
En este sentido, una de las empresas más interesadas en el proyecto se llama Frontón Beti-Jai Madrid. Esta firma, que ha mantenido numerosos contactos con la Comunidad, lleva cinco años trabajando en un proyecto cuyo objetivo principal es la recuperación del juego de pelota en Madrid. La propuesta de Eduardo Grass, director de esta empresa, consiste en la rehabilitación de la instalación y acondicionarla para el juego de pelota, para lo que espera contar con ayudas institucionales. "Se trata de recuperar un deporte autóctono que se debe proteger. Somos el país que ha inventado ese deporte y estamos dejando que desaparezca", declara. Eduardo Grass es un pelotari licenciado en Educación Física y vecino del frontón Beti-Jai durante 30 años. El empresario cuenta con un amplio equipo de profesionales para llevar a cabo el proyecto.
Según los planes de Grass, este local, con capacidad para 2.500 espectadores, serviría también como espacio escénico para espectáculos de teatro o danza y para otras competiciones deportivas. Sobre todo aquellas autóctonas y poco conocidas, para cuya promoción piensa crear una asociación que tendría como sede el frontón.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.