El alcalde de Benicàssim admite que asignó una obra sin concurso
El alcalde de Benicàssim, Alejandro García, admitió ayer haber asignado una obra a la empresa Lubasa por un importe de 100 millones de pesetas sin haberla sacado a concurso ni haber procedido a la correspondiente adjudicación. García mantuvo que después de que el Ayuntamiento solicitara presupuestos a tres empresas, Lubasa era la que ofertaba un precio más ajustado con 99,9 millones de pesetas, mientras que el presupuesto redactado por los técnicos municipales ascendía a 124 millones.
Además, el alcalde alegó "falta de tiempo" para justificar el anormal desarrollo e irregular procedimiento en el encargo y ejecución de las obras. Las obras son financiadas indirectamente por la Generalitat Valenciana y la Diputación de Castellón, que aportarán un total de 100 millones de pesetas a través de convenios con el mismo Ayuntamiento de Benicàssim. El solar en el que se están llevando a cabo el citado acondicionamiento está alquilado por el Ayuntamiento y albergará la celebración del Festival Internacional de Música Independiente de Benicàssim (FIB) el próximo fin de semana. El recinto se está adecuando para dar cabida a las cerca de 25.000 personas que está previsto que acudan al evento musical. El alcalde afirmó ayer que "debido al poco tiempo de que disponíamos no ha dado tiempo de sacar las obras a concurso". Esta premura ha sido provocada por la imprevisión de los populares en solicitar la recalificación del terreno, que precisa la declaración de interés comunitario, y en redactar el pliego de condiciones para proceder, posteriormente, a la adjudicación de las obras. Todo ello pese a que la elección del solar está determinada desde hace varios meses. Cuando el equipo de gobierno municipal constató que, de cumplirse los plazos legalmente establecidos, las obras no estarían finalizadas para la fecha fijada para la celebración del festival, optó por designarlas directamente. Alejandro García aseguró ayer que "ninguna empresa" quería hacerse cargo de esta obra, ya que era preciso ejecutarla en el exiguo plazo de un mes. "Se tuvo que presionar para que la empresa aceptara", aseveró. A todo ello se une que en el acta del pleno municipal, celebrado el pasado 13 de julio, consta que el conejal de la Asociación de Residentes y Veraneantes de Benicàssim (ARB), Manuel Llorca, manifestó la existencia de un documento que "supone el apoyo al desarollo del FIB y que el día de mañana los gastos ocasionados se pagarán", según dice el escrito. Este documento calificado de "compromiso" por el que, al parecer, se asegura el pago a la empresa que ejecuta las obras, está firmado por los integrantes del "grupo popular, ARB y el señor Eliseo Salvador", según el acta, que añade que "el señor Moliner (también del PP) no estaba en esa firma". Eliseo Salvador actualmente forma parte del equipo de gobierno municipal y que los integrantes de ARB están incluidos en la oposición. En el citado pleno se aprobaron los proyectos básicos de instalaciones eléctricas y obras civiles y la adscripción de éstos al uso deportivo-recreativo, aunque los mismos han de ser aprobados definitivamente por la Consejería de Obras Públicas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.