La fiscalía alemana archiva la causa contra López de Arriortua
La fiscalía de Darmstadt confirmó ayer, lunes, que ha archivado las diligencias abiertas contra el antiguo directivo de Volkswagen José Ignacio López de Arriortua, acusado de espionaje industrial por General Motors, para la que trabajó previamente.
Esta decisión se tomó el pasado viernes, de acuerdo con la defensa, debido a que el tribunal encargado del asunto "ha tenido en cuenta las importantes heridas sufridas por el acusado López", que sufrió un accidente de coche a principios de este año, según ha informado la fiscalía.
Las secuelas de este accidente "ponen en cuestión la capacidad del acusado para comparecer" y, sobre todo, retrasan el proceso a una fecha tan lejana que resulta imposible de fijar.
Superlópez, como se le conoció en la industria automovilística, debe pagar no obstante una multa de 400.000 marcos (34 millones de pesetas), y los otros acusados, cantidades que oscilan entre los 40.000 y 100.000 marcos (de 3,4 a 8,5 millones de pesetas).
La fiscalía alemana había anunciado el sábado que la decisión debía tomarse esta semana y que se debía a la complejidad jurídica de los documentos presentados y la duración excesiva previsible del proceso.
López de Arriortua protagonizó en 1993 uno de los grandes escándalos de espionaje industrial, que enfrentó a los dos gigantes de la industria del automóvil. La estadounidense General Motors acusó a quien había sido el número dos de la empresa de haberse marchado a la compañía alemana Volkswagen, junto a varios de sus colaboradores, llevándose un número importante de documentos secretos.
El desenlace ha variado tras el grave accidente de automóvil sufrido por Arriortua el pasado 8 de enero en la provincia de Burgos. Cuando se produjo este accidente, ya había abandonado Volkswagen y había creado en España una empresa de asesoría.
