Reverdece Vitoria

Medio ambiente significa parques y zonas verdes, pero también tráfico, agua, energía, industria, urbanismo y otros ámbitos de la vida cotidiana. La clave está en combinarlos de forma correcta. El pleno del Ayuntamiento de Vitoria dará un paso importante en esta cuestión a finales de mes, aprobando el documento Agenda 21, algo así como el catecismo de toda ciudad que desea ser ejemplar en cuestiones medioambientales. De momento muy pocos son los municipios europeos que han redactado su propio texto: Leicester (Gran Bretaña), Munich (Alemania), Aalborg (Dinamarca) y, en España, Barcelona se unirá muy pronto al grupo. La Agenda 21 es una idea nacida en 1994, cuando 80 ciudades europeas y 253 representantes de organizaciones internacionales firmaron la Carta de Aalborg, en la que se comprometían a establecer las bases para un desarrollo sostenible del continente. Lo que ocurre es que durante estos tres años de trabajo esta serie de conceptos han estado encerrados en los despachos de políticos y técnicos. Ahora, se pretende familiarizar al público con los términos tan abstractos como sostenibilidad, Agenda 21... Para empezar, el Ayuntamiento de Vitoria se ha autoexaminado y ha realizado una encuesta entre mil hogares preguntando acerca de diez grandes temas, vistos todos desde el punto de vista de medioambiental: ruidos, urbanismo, naturaleza, educación, salud, contaminación, tráfico, agua, energía e industria. En todos estos ámbitos se pretende actuar. "Somos una ciudad que está bastante bien, pero tenemos cosas que mejorar. Por ejemplo, la gente está muy sensibilizada con la calidad del agua, pero no con su consumo. Para ello intentaremos enganchar a todos los ciudadanos", analiza José Antonio Pizarro, concejal delegado de Medio Ambiente. Una vez sabida la opinión de los ciudadanos y conocida la nota que Vitoria ha conseguido en materia verde, el Ayuntamiento tratará de acercar los contenidos de la Agenda 21 a la ciudadanía a través de una publicación diseñada por Miguel Pérez de San Román, con un formato "atractivo, fácil de leer, pero al mismo tiempo serio y riguroso" y que se distribuirá en otoño. En ella se informará sobre las actuaciones que está desarrollando la Corporación y las que se prevén realizar en el futuro. Existen ejemplos sencillos y cercanos. Fruto de los trabajos de elaboración de la agenda, Vitoria ha decidido en los últimos meses derivar los ríos del sur -que durante muchas décadas han provocado inundaciones- así como instalar una planta de tratamiento de residuos y apostar por el traslado de la acería de Sidenor, que provocaba una importante contaminación en el barrio de Zaramaga. La agenda, que se refrescará cada año con nuevos contenidos, trata de ser un texto lo más práctico posible, lejos de teorías y tecnicismos. Plantea 21 actuaciones concretas. Como ejemplo, para evaluar cómo marcha la cuestión del urbanismo en la ciudad se medirá el número de licencias para rehabilitación, el número de habitantes que pueden disponer de sus servicios básicos cerca de su casa o la cantidad de edificios nuevos con certificado de Eficiencia Energética. "Así, sabremos si lo llevamos todo bien o nos estamos equivocando. Nos someteremos a un examen anual", indica Pizarro. Unanimidad municipal El proyecto parte con el apoyo unánime de todos los grupos políticos municipales. De hecho, se han comprometido a realizar un pleno monográfico al año sobre medio ambiente. Además, se creará un Consejo Sectorial donde estarán representados asociaciones ecologistas, la Univeresidad, empresas privadas, ONGs, además de los propios grupos políticos. Como complemento al libro, el Ayuntamiento está preparando una exposición que circulará por todos los centros cívicos de la ciudad. Antes, se exhibirá en el Congreso Nacional de Medio Ambiente, que se celebrará en Madrid la primera semana de noviembre y donde están invitadas Barcelona y Vitoria para presentar sus planes de Agenda 21.