El Constitucional anula una condena tras padecer el reo cinco años de cárcel
El Tribunal Constitucional ha anulado por falta de pruebas una condena de 12 años de prisión contra un hombre, basada en su participación junto a dos mujeres en una operación de tráfico de drogas, de tres kilos de cocaína, en el aeropuerto de Barajas. El reo ya ha cumplido cinco años de cárcel. El Constitucional considera que se ha vulnerado el derecho a la presunción de inocencia.El Tribunal Constitucional anula así una sentencia de la Audiencia Provincial de Madrid y la que la confirmó, dictada por el Tribunal Supremo, en lo que se refiere a la condena de Luis Humberto Toro, por sendos delitos contra la salud pública y de contrabando. El Constitucional argumenta falta de pruebas sobre el conocimiento de los hechos por parte de Toro.
Según la resolución judicial, contra Luis Humberto no existen más pruebas que su presencia en el recinto del aeropuerto, adonde había acompañado a una de las acusadas para que recogiera el alijo de manos de la otra condenada, que llegó procedente de Río de Janeiro con el cargamento de cocaína en una faja alrededor de su cuerpo.
Para el Constitucional, no ha quedado acreditada la participación de este hombre en la operación, desarrollada en 1993 y en la que María da Conceiçao Ana-nias le entregó la droga a Carmen Yolanda Ernst Meschwitz, a quien Luis Humberto aguardaba en el exterior del aeropuerto.
La sentencia rechaza como prueba la mera presencia del acusado en el aeropuerto y las contradicciones entre su declaración y las de una de las condenadas.
El Tribunal apunta que de la presencia del acusado "en el aeropuerto y las contradicciones analizadas no se advierte la constancia de un enlace lógico, preciso y directo del que resulte la participación" del acusado, cuyo derecho a la presunción de inocencia considera vulnerado en las dos sentencias anteriores, por lo que "procede estimar el amparo" y reponerle sus derechos.
La contraseña
La sentencia de la Sección 17 de la Audiencia Provincial de Madrid consideró probado que el 4 de mayo de 1993 llegó María da Conceiçao con la droga que tenía que entregar a Carmen Yolanda, que estaba en el vestíbulo, y a Luis Humberto, que se encontraba en la puerta de entrada.Al ser descubierta la droga, María da Conceiçao colaboró en todo momento con la Guardia Civil, ante la que confesó que se había comprometido a traer la mercancía a Madrid y a entregársela a una mujer con una vestimenta concreta en el aeropuerto de Barajas, a la que debía mostrar como contraseña una tarjeta de un hotel de Río de Janeiro.
A continuación, los agentes de la Guardia Civil le pusieron una vigilancia controlada, y la vieron contactar con Carmen, con quien cambió unas palabras antes de mostrarle la tarjeta. Al salir al exterior, se les acercó Luis Humberto y, cuando los tres iban hacia el aparcamiento, fueron detenidos.
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