El alcalde de Pinto apoya al socorrista que rescató al niño

El alcalde de Pinto, Antonio Fernández, del PSOE, mostró ayer su respaldo a la actuación de los socorristas y del personal sanitario de la piscina municipal en la que el miércoles se hundió un niño de cinco años. Como consecuencia del accidente, el pequeño entró en coma. Ayer seguía en el mismo estado crítico.El alcalde de Pinto, aunque a la espera de los resultados de la investigación municipal abierta por el accidente, defendió el trabajo de Juan Antonio Martínez Torres, el socorrista que rescató al niño. Martínez Torres está federado desde 1995 y ésta es su tercera temporada en la piscina municipal de Pinto. En mayo pasado superó con éxito las pruebas de reciclaje a las que se someten cada dos años estos profesionales. Martínez Torres es técnico titulado de salvamento acuático y de primeros auxilios.

El accidente ocurrió en la más pequeña de las tres piscinas de la instalación deportiva. En el vaso (de 17 metros de largo por 9 de ancho) se encontraban 10 personas. El socorrista se lanzó en el momento en que vio que el niño no se movía. Nada más rescatarle, llevó al crío a la enfermería, donde le atendieron dos sanitarios. El concejal de Seguridad Ciudadana, el socialista Fernando González, recordó que la piscina municipal de Pinto amplió esta temporada el número de socorristas, de cinco a ocho, "para que se pudieran hacer dos turnos y aumentar la seguridad". La ley marca que para instalaciones con una superficie de 1.500 metros cuadrados de agua debe haber tres socorristas, y en Pinto, con esa superficie, había cuatro cuando se produjo el accidente.

El percance no supuso ayer una disminución de público en las piscinas. Aunque era el principal tema de conversación, la mayoría lo achacaba a "una desgracia". El PP de Pinto envió una nota en la que pedía la depuración de responsabilidades por el accidente. También exigía que se explicase por qué la piscina infantil permanecía cerrada y por qué el equipo de socorrismo fue adjudicado "directamente y sin examen previo a una empresa municipal sin experiencia en este tipo de actividades". Por su parte, la Unión de Consumidores de España (UCE) recordó que las piscinas infantiles, concebidas para menores de seis años, deben estar en un recinto separado del de adultos y tener una profundidad máxima de 0,60 metros. En el caso de Pinto, la piscina tenía una profundidad mínima de 0,90 metros.